El Universal
13 de febero de 2006
El proyecto multiinstitucional mexicano Satex (Satélite Experimental), que comenzó a desarrollarse en 1994 con el fin de diseñar y construir un satélite mexicano con el concurso de varias instituciones, para ponerlo en órbita
El proyecto multiinstitucional mexicano Satex (Satélite Experimental), que comenzó a desarrollarse en 1994 con el fin de diseñar y construir un satélite mexicano con el concurso de varias instituciones, para ponerlo en órbita, y que ha presentado diversos problemas relacionados con el retraso en la entrega de recursos económicos y de planeación para la entrega de ciertos componentes del proyecto por parte de algunos grupos científicos, cuenta ya con una computadora inteligente con capacidad para autorrepararse, y parece cobrar nuevos bríos.
La computadora, elaborada por Esaú Vicente Vivas y su equipo de colaboradores, es un sistema inteligente concebido específicamente para ser empleado en la tecnología satelital, que cuenta con sus propias refacciones para darse mantenimiento y autorrepararse en el espacio, en caso de ser necesario.
Según Vivas, investigador del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y miembro de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), esta tecnología, conocida como Microsatélite con sistema inteligente, ya puede ser empleada en la Tierra con toda confiabilidad, en equipos que no pueden «darse el lujo» de fallar, tales como computadoras de uso quirúrgico o sistemas financieros.
De hecho, este tipo de sistemas inteligentes de cómputo ya operan en la Tierra desde hace tiempo. El ejemplo más claro de ellos está en la red de cajeros automáticos. La diferencia con éstos, según Vivas, radica en el tamaño, pues en comparación con los equipos empleados por los cajeros, que son muy grandes, pesados y con un alto consumo de energía, el desarrollado para el Satex tiene menor peso y tamaño, así como consumo de energía.
De ahí que, a pesar de que esta tecnología se emplea también en plantas nucleares, además de los bancos, el reto de crear el Microsatélite con sistema inteligente consistió en desarrollar un sistema inteligente de pequeñas dimensiones, que pudiera ser insertado en un dispositivo de menos de 100 kilogramos.
Asimismo, el investigador señaló que desde 2004 se crearon instrumentos especiales para que el funcionamiento de desarrollos tecnológicos, concebidos para operar en el espacio, pudieran ser verificados y validados en la Tierra, sin necesidad de enviar un satélite al espacio para tal cometido.
«Para validar nuestros equipos tuvimos que desarrollar un simulador de satélite, es decir, un software que simulara a las demás computadoras que intervendrían en este proyecto, así como el tráfico en la red», dijo.
Esaú Vicente Vivas recordó que en la última década se dio un boom en el desarrollo de tecnología satelital pequeña, mismo que estuvo acompañado por importantes avances en las tecnologías de la información, principalmente en el ramo de la electrónica, que trajeron como consecuenca la creación de equipos mucho más compactos y eficientes.
La importancia de este desarrollo tecnológico radica en que uno de los mayores problemas a que se enfrentan los satélites es que no están exentos de sufrir fallas y, cuando éstas ocurren, como sucedió con el telescopio espacial Hubble, no se les puede dar mantenimiento, o el mismo resultaría incosteable.
Al respecto, el especialista indicó que «un satélite en la actualidad puede pesar seis kilogramos, pero realiza lo que hace una década hacía uno de 60 o 70. Eso implica que los adelantos tecnológicos permiten hacer cosas más pequeñas, lo cual ha repercutido en una mayor investigación en esta área en diversas universidades del mundo.»
En relación con el Microsatélite con sistema inteligente, Vivas precisó que su equipo de colaboradores se interesó de manera particular en el desarrollo de la computadora central para el Satex, de manera que pudirea efectuar autodiagnósticos y autorrepararse, dado el caso, debido a que se trata de algo novedoso, pues a pesar de que en diversas universidades se trabaja en sistemas inteligentes, éstos se aplican en otros rubros, como el de los sistemas propulsores.
Finalmente, Vicente Vivas comentó que la computadora central del Satex fue desarrollada a partir de normas tecnológicas militares, pues sus componentes son los mismos que se utilizan en la fabricación de un avión «K» y algunos misiles. (AMC)