Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/78/05
San Luis Potosí, S.L.P., martes 23 de agosto de 2005
- Se destinan 400 mil millones de pesos anuales a este rubro, informa legislador durante la Reunión Regional de Ciencia y Tecnología
- De no impulsarse la ciencia y la tecnología en el país en los próximos 10 años se va a llegar ‘un suicidio colectivo’, alerta Presidente de la AMC
- La Reunión Regional de Ciencia y Tecnología se lleva a cabo en San Luis Potosí.
Foto: Jorge H. Sales Ortega/AMC
Rectores de universidades, legisladores, directores de centros de investigación y funcionarios estatales coincidieron en la urgencia de crear un acuerdo nacional en ciencia y tecnología que trascienda sexenios, dado que hoy en el país se gasta el equivalente al 5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en dependencia tecnológica y sólo se invierte el 0.37 por ciento del PIB para apoyar la investigación científica.
Al dar inició los trabajos de la Reunión Regional de Ciencia y Tecnología, que se desarrolla en esta ciudad, el presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología en la Cámara de Diputados, Julio César Córdova Martínez, informó que en la actualidad México gasta alrededor de 400 mil millones de pesos anuales en dependencia tecnológica.
¡Lo anterior!, dijo el legislador priísta, ¡equivale al 5 por ciento del PIB, lo que significa que una gran parte de nuestros recursos económicos se van por falta de apoyo a la generación de conocimiento; de allí la importancia de crear un gran acuerdo nacional que trascienda sexenios, con metas a mediano y largo plazo!.
Acompañado por el presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), Octavio Paredes López, y el gobernador de San Luis Potosí, Marcelo de los Santos Fraga, el diputado federal comentó que es necesario que los recursos federales se incrementen en por lo menos 10 mil millones de pesos para la ciencia en el próximo año, para cumplir con la meta del 1 por ciento que está estipulada en las reformas legislativas que se hicieron hace unos meses.
En contexto
Construyen científicos puentes con la sociedad.
Aunque mencionó que ya se sostienen pláticas con funcionarios federales para darle un incremento al presupuesto científico y tecnológico el próximo año, reconoció que hasta el momento el poder ejecutivo no le ha dado a la ciencia y la tecnología la importancia que merece.
En ese sentido, Córdova Martínez coincidió con la encuesta publicada hace unas semanas por la AMC, en donde se reprueba la función del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en la presente administración, ¡porque el poder ejecutivo no ha cumplido, ni tomado en consideración o dado la importancia que merece a la ciencia y tecnología!.
Acerca de esa dependencia tecnológica, Octavio Paredes López destacó que ello se refleja claramente cuando se ve que, mientras México le exporta a los llamados ¡tigres asiáticos! mercancías por alrededor de 600 millones de dólares, ellos le venden productos por aproximadamente 10 mil millones de dólares, ello sin contar la mercancía que llega de manera ilegal.
El presidente de la AMC dejó en claro que, de no impulsar la ciencia y la tecnología en el país de manera decidida en los próximos 10 años, se va a llegar ¡un suicidio colectivo!, pues hay temas de carácter científico que no se pueden posponer como el problema del agua, el campo o la medicina.
¡Â¿A dónde puede ir un país con una inversión tan baja del 0.37 por ciento del PIB y luego mal gastada? Porque al presidente (Vicente) Fox se le ocurrió poner a un señor en el Conacyt y, la verdad, nunca habíamos tenido un director tan ineficiente!.
Sin embargo, hizo énfasis en que, en general los políticos, sin importar el color, le han conferido poca importancia a la innovación científica y tecnológica, por lo que destacó la labor emprendida por la AMC desde hace unos meses de acercarse a quienes toman decisiones en el país, para convencerlos de la importancia de impulsar este sector.
En su oportunidad, Mario García Valdés, rector de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, indicó que ya es hora de que se defina una política de Estado para la ciencia y la tecnología, la cual garantice el trabajo científico a mediano y largo plazo.
Explicó que ello es fundamental, porque la comunidad científica vive en una completa inseguridad financiera, por lo que se preocupan más en gestionar el presupuesto cada año que en sus propias investigaciones.
¡Se debe conseguir un proyecto a largo plazo, que trascienda sexenios, con el fin de que los mismos investigadores puedan planear desde la formación de sus recursos humanos hasta los pormenores de cada uno de sus proyectos de investigación!.
En ese aspecto, el rector de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, Rafael Urzúa Macías, destacó que una inversión ¡a medias! en el sector científico y tecnológico no significa que se obtengan resultados a medias, sino que ello origina nulo resultado, porque no se llevan hasta el final los proyectos de estudio.
Destacó que, debido a ese escaso apoyo en materia de ciencia y tecnología, la universidad a su cargo invierte alrededor de un millón de pesos por producto relevante de investigación, lo que significa muy altos recursos, dado que no tiene la infraestructura necesaria en cuanto a equipamiento, ni recursos humanos.
Aunado a ello, dijo, la competencia por recursos económicos es cada vez más severa, y el Conacyt, por la misma cantidad de recursos que antes daba, ahora exige más formación de recursos humanos, publicaciones y atención a problemas sociales.
Durante su conferencia La educación superior: ¿dónde estamos y hacia dónde debemos ir?, el secretario de Educación Pública en el sexenio de Carlos Salinas, José íngel Pescador Osuna, resaltó los grandes retos que debe enfrentar el país en materia de educación, como el de incrementar el porcentaje de jóvenes que ingresan al nivel licenciatura, que actualmente es de sólo el 22 por ciento.
Comentó que se debe poner en marcha, lo antes posible, programas que sean convenientes desde el punto de vista costo-beneficio, dado que algunos como el actual de Escuela de calidad ha requerido de muchos millones de pesos y no ha arrojado los resultados esperados.
Finalmente, Pescador Osuna dejó en claro que si bien la media nacional de escolaridad es de sólo 7 años, el problema se agudiza cuando se descubre que hay entidades como Chiapas que están en alrededor de cinco años y que, para lograr subir tan sólo un año de escolaridad, debe invertir alrededor de ocho años.