El Occidental
27 de noviembre de 2005
Durruty Jesús De Alba Martínez
Disminuye presupuesto destinado a ese rubro
Si pretendemos aspirar a ser más que un país maquilador y «changarrero», la solución indiscutible es la inversión en educación, ciencia y tecnología, lo que ya nos demostraron los emergentes «dragones asiáticos», sobre todo Corea, donde recientemente se paseó, y esperemos que algo haya aprendido, nuestro Presidente.
Del prometido incremento de¡ porcentaje de¡ producto interno bruto (PIB) dedicado a ciencia y tecnología para alcanzar el 1 %, año tras año comprobamos su disminución: el próximo año será de 0.35% a diferencia de¡ 0.42% que se dedicó en el año 2000, según el comunicado de prensa AMC/111/05 (16 de noviembre de 2005) emitido por la Academia Mexicana de Ciencias.
Ante el drástico panorama presupuesta¡ sin embargo hay acciones, algunas mayores que otras, que pueden preservar lo más valioso que tiene nuestra nación: sus niños y jóvenes, y la preparación que les permita convertirse en adultos de provecho para la sociedad en que se desenvuelvan.
En tal tenor, poca difusión recibieron las actividades impulsadas por cerca de tres docenas de instituciones y organizaciones en el pasado mes de octubre, que fue denominado Ves de la divulgación científica y tecnológica en Jalisco».
Una de tales instituciones fue el Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI) de la Universidad de Guadalajara, que en sus laboratorios de física montó varias exposiciones sobre fenómenos físicos que fueron visitadas por cientos de estudiantes, en la mayoría de los cuales fue notoria su curiosidad e interés ante las explicaciones que se les brindaban.
Quizá eso sea lo fundamental en la enseñanza de las ciencias, preservar y avivar la natural curiosidad de los niños hacia la naturaleza, y aunque no vayan a dedicarse a carreras científicas o tecnológicas, al menos guarden un grato recuerdo de las materias de ciencias, y en el futuro que sean diputados o senadores no estrangulen el presupuesto respectivo.