Diario de México
07 de septiembre de 2005
Víctor López Alcaraz
Por motivos personales, Jaime Parada Avila, presentó su renuncia como director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), al presidente Vicente Fox Quesada.
En una carta al titular del Ejecutivo, el ex funcionario agradeció la oportunidad que le brindó de servir al país, así como el apoyo que le otorgó en la realización de los cambios necesarios para colocar a la ciencia y la tecnología como actividades estratégicas para el desarrollo social y económico de la nación.
Cabe recordar que Parada Avila, quien asumió el cargo el 17 de enero de 2001, recibió múltiples críticas por parte de la comunidad científica, es decir, de la Academia Mexicana de las Ciencias (AMC) y del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
A través de un comunicado, se indica que en los cinco años de la administración el ahora ex funcionario impulsó la creación de un nuevo marco estructural con la aprobación, por parte del Congreso de la Unión, de la Ley de Ciencia y Tecnología y la Ley Orgánica del Conacyt, que le otorgan otra jerarquía y le dotan de diversos instrumentos para apoyar la investigación y el desarrollo tecnológico.
En el periodo 2001-2004 fueron apoyados 2 mil 924 proyectos de ciencia básica, con recursos por 2 mil 334 millones de pesos.
En este rubro destaca la creciente participación de las instituciones de educación superior del interior de la República, de 54 por ciento en 2004.
También fueron formalizados y están en operación 47 nuevos fondos, 17 sectoriales, con dependencias y entidades del Gobierno federal, y 31 mixtos, 29 estatales y 2 municipales, a los cuales se destinó 4 mil 976 millones de pesos para apoyar 4 mil 588 proyectos en el periodo 2001 2004.
En el pasado inmediato todos los estados juntos invertían apenas 30 millones de pesos. Del presupuesto del Conacyt y sus centros de investigación se canalizó más de 70 por ciento a las entidades federativas, fortaleciendo así las capacidades regionales de investigación.
Sin embargo, fue reprobado en su labor por miembros de la comunidad científica, y de acuerdo con una encuesta presentada por la AMC, con una calificación de 5.49 por científicos del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), quienes consideraron deficiente su labor de política científica, el apoyo a proyectos de investigación, la formación de recursos humanos y la distribución de recursos financieros, según la encuesta sobre la situación de la ciencia y la tecnología en México, presentada ayer por la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).