La Crónica de Hoy
Por Raúl Cruz de Jesús
13 de junio de 2005
Jacobo Konigsberg Levy, científico mexicano de la Universidad de Florida y experto en física experimental de altas energías, ingresará como miembro correspondiente a la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
El destacado investigador es uno de los tres mexicanos —que junto a Heriberto Castilla, del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN, y Raúl Hernández, de la Universidad Veracruzana— participaron en los experimentos que condujeron al descubrimiento de la partícula elemental más pesada conocida hasta ahora: quark top.
El quark top se produce sólo en una de cada 10 mil millones de colisiones, ¡por lo que fue muy difícil concluir estadísticamente y sin lugar a duda que se había descubierto al quark top. Por lo que decidimos poner en el título de nuestra publicación la palabra ¡evidencia! en vez de ¡descubrimiento!! recuerda el físico.
A partir de 1990, año en que se incorpora a esta investigación, ¡por dos años nos dedicamos a perfeccionar nuestros detectores y después a tomar datos. Al final parecían incluir finalmente evidencia de que se habían producido quarks top en las colisiones de protones. Esta evidencia nos permitió hacer la primera medición de la masa de este quark: 174 gigaelectronvolts!, indica.
Mediante la figura de miembro correspondiente la Academia reconoce la trayectoria y obra de investigadores extranjeros o mexicanos que trabajan en otros países que, además de haber destacado en su trabajo, han contribuido de manera importante al desarrollo de la ciencia mexicana. Actualmente la AMC está integrada por 1847 investigadores, entre ellos 58 miembros correspondientes, de los cuales 9 son premios Nobel.
Con 46 años de edad, Konigsberg Levy se convertirá en miembro correspondiente en entrar a la AMC.
Fuera del terreno científico ha establecido buenas relaciones con la comunidad de físicos mexicanos al colaborar en varias ocasiones con la División de Partículas y Campos de la Sociedad Mexicana de Física y al recibir estudiantes mexicanos de licenciatura dentro del Programa de Veranos en Laboratorios del Extranjero.
Miguel íngel Pérez Angón, miembro de la AMC, quien lo postuló para ingresar a esta asociación científica, explica que en nuestro país realizar sesiones experimentales de altas energías es complicado debido a su carácter práctico, ya que para realizar experimentos con partículas elementales se requiere construir grandes aceleradores, cuyos costos son elevados.
De ahí la importancia del trabajo y perseverancia de Konigsberg Levy, pues los investigadores interesados en proseguir su carrera científica en esa área del conocimiento deben integrarse a uno de los tres grandes colaboraciones internacionales asociadas con laboratorios de aceleradores ubicadas en Estados Unidos, Suiza o Alemania.