Reforma
8 de febrero de 2012
Diana Saavedra
Philip K. Maini, investigador del Instituto de Matemáticas de la Universidad de Oxfordy quien ingresó como miembro a la AMC
La matemáticas ayudan a predecir y explicar el comportamiento de algunos organismos e inclusive de la neuronas
Ciudad de México.- Aprender matemáticas es un problema complejo para todos los países pues existe un rechazo natural hacia esta área del conocimiento, por lo que es importante que los especialistas dedicados a esta ciencia difundan sus beneficios a toda la población.
Philip K. Maini, investigador del Instituto de Matemáticas de la Universidad de Oxford y considerado como uno de los especialistas más reconocidos en ciencias biomédicas, explicó que para acercar a los niños a los números se requiere de un trabajo de divulgación más intenso por parte de los matemáticos.
«Es algo que vemos en el Reino Unido también, pero no es algo que deba quedar sólo en los padres o en los profesores, los matemáticos deben ayudar a crear materiales didácticos que hagan entender a los pequeños la importancia y relevancia de los números», señaló tras ofrecer la conferencia Modelaje matemático en Biología: Un cuento de éxitos y fracasos.
Ante estudiantes y profesores del Instituto de Física de la UNAM, Maini enfatizó que los números y las matemáticas son una herramienta muy útil para comprender el mundo que nos rodea y, como prueba de ello, es su uso en diversos estudios científicos para predecir el comportamiento de algunos organismos e inclusive de las neuronas.
«Si queremos saber las propiedades físicas de cualquier sustancia es necesario verla como un todo, y en muchas ocasiones los modelos matemáticos nos permiten abstraer el conocimiento para tratar de comprender los diversos fenómenos naturales», comentó el especialista quien ingresó como miembro correspondiente a la Academia Mexicana de Ciencias.
«Uno de los principios básicos de la ciencia es estar conscientes de que lo que creemos está mal, así que es mejor contar con colaboradores que nos expliquen mediante el pensamiento abstracto cómo se pueden comportar algunos elementos».
Maini narró que mientras realizaba estudios sobre la diferenciación celular en embriones de ratón, uno de sus colegas le preguntó si sería posible predecir hacia dónde debían moverse las células y en qué casos lo harían diferente utilizando matemáticas.
«Mi respuesta fue concreta: No. Sin embargo, comenzó a trabajar y comparó las células con polígonos. El resultado fue que encontramos justamente cómo era el movimiento celular y no sólo eso, lo pudimos probar en el laboratorio», añadió Maini.
Otros ejemplos puestos por el matemático fueron el comportamiento neuronal al enviar señales de un lugar a otro, así como el crecimiento de las células tumorales y los patrones de coloración en diversos tipos de animales marinos.
«Cuando queremos saber todo esto siempre es bueno mejorar todos los modelos y en este sentido las matemáticas nos permiten enfocarnos y ajustarnos a lo que necesitamos indagar, muchas veces uno como biólogo ve que hay muchas variables y muchas cosas, pero esta herramienta siempre nos ayuda a ser más precisos en lo que buscamos», indicó el investigador.
«Las matemáticas siempre nos hacen cuestionar todas las suposiciones y plantearlas de una forma concreta, nos permiten ser más precisos para elaborar nuestro trabajo».
Hora de publicación: 18:17 hrs