El Universal
11 de noviembre de 2005
Nurit Martínez
Supera en OCDE a países como Nueva Zelanda, Hungría y Noruega
De entre 30 países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el lugar número 21 en la producción de artículos científicos en los que se reportan descubrimientos o innovaciones para tratar problemas de áreas como la medicina, biología, las matemáticas, y química, entre otras. Con esta posición nuestro país supera la productividad de los científicos de naciones como Noruega, República Checa, Nueva Zelanda, Hungría y Portugal, entre otros.
Sin embargo, al medir el impacto de las investigaciones mexicanas en aplicaciones de creación tecnológica o de innovación científica, la producción de los científicos mexicanos cae al lugar 27, de acuerdo con el Informe General del Estado de la Ciencia y la Tecnología 2004.
El documento elaborado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) revela que la tendencia de México en la participación científica mundial «se mantiene sin cambios» en un periodo que va de 1999 al año 2003, por lo que «la producción de artículos científicos no es suficiente para influir o alterar su participación en el mundo», tal y como lo señala el documento de la National Science Foundation y que dio a conocer EL UNIVERSAL.
A propósito de la conmemoración del Día Mundial de la Ciencia, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) organizó una ceremonia en Budapest, Hungría, para entregar el Premio de Ciencias 2005 al investigador de origen ruso, nacionalizado mexicano, Alexander Balankin. Sin embargo, en nuestro país el Conacyt, organismo cabeza de ese sector, informó que «no se realizaron actividades específicas en torno de esta celebración».
Al respecto, el presidente de la Academia Mexicana de la Ciencia, Octavio Paredes, afirmó que en este momento, dadas las condiciones presupuestales en las que se ha desarrollado la ciencia en el país, en lo que va de esta administración federal «más que festejar debiéramos decretar día de luto nacional».
Explicó que con base en las cifras del propio Conacyt, la producción científica, la inversión, la creación de nuevos espacios para los jóvenes investigadores «ha ido en retroceso».
René Drucker Colín, coordinador de la Investigación Científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), aseguró que pese a las condiciones económicas de la ciencia en el país, los indicadores internacionales sobre la producción científica mexicana «están revelando que, pese a ser una comunidad pequeña, nuestra producción es relativamente buena. Que estamos haciendo el trabajo».
En tanto que en términos de competitividad, refiere, «es baja porque las empresas no le están apostando a la ciencia para mejorar su desempeño».
El también ex presidente de la Academia Mexicana de Ciencias y Premio Nacional de Ciencias y Artes aseguró que en particular en los últimos cinco años «ha habido miopía, miopía y sólo miopía del gobierno del presidente Vicente Fox para comprender el significado de la ciencia para el país».
El Informe del Conacyt, del cual hasta ahora sólo se habían difundido folletos, señala que la formación y capacitación de personas a nivel de doctorado en México, y que se traduce en el grupo potencial de quienes están en posibilidad de seguir una carrera científica, es «insuficiente» en comparación con otras naciones en el mundo.
Para 2003 el reporte señala que en México se graduaron mil 443 doctores, mientras que EU formó a más de 40 mil; España a más de 6 mil, y Brasil a 7 mil 700.
El número de mil 443 doctores que egresaron de las universidades mexicanas en el año 2003 equivale al 29 por ciento de la meta planteada al inicio de la actual administración, de generar cinco mil doctores por año.
Más adelante, en el mismo documento, el Conacyt justifica su actuación. «No obstante la realización de esfuerzos extraordinarios en los últimos años, parece imposible alcanzar los niveles requeridos para el despliegue de México, sin una plataforma sólida de científicos formados con la suficiente calidad».