El Golfo
4 de diciembre de 2006
Dirección de Comunicación Universitaria
Asegura el investigador de la UNAM, León Olivé
Necesario desarrollar una cultura tecnológica, es decir, diseñar, desarrollar, utilizar, aprovechar y evaluar los sistemas técnicos que beneficien a la sociedad
El fortalecimiento de la ciencia y la tecnología no es por sí solo suficiente para el desarrollo social; es necesario articularles con el resto de la sociedad, sostuvo
Potenciar el desarrollo tecnológico no significa únicamente utilizar más tecnología, sino desarrollar la cultura tecnológica, lo que implica tener la capacidad de diseñar, desarrollar, utilizar, aprovechar y evaluar los sistemas técnicos que sean apropiados para obtener los fines que persiguen las personas y la sociedad, sostuvo el investigador del Instituto de Filosofía de la UNAM, León Olivé.
Durante su participación en el V Foro de Ciencia, Tecnología y Sociedad, organizado por la Universidad Veracruzana (UV), Olivé afirmó que una sociedad es culta tecnológicamente si, por una parte, cuenta con grupos que tienen la capacidad de generar nuevos sistemas tecnológicos y tecnocientíficos, y si además la gente en general cuenta con la preparación para hacer evaluaciones de esos sistemas, y si pueden realizarlas de manera autónoma.
¡La cultura tecnológica debe incluir la capacidad para vigilar y controlar adecuadamente los riesgos que generan los sistemas técnicos y tecnológicos y tecnocientíficos. Una sociedad tendrá más cultura técnica mientras mayor sea su capacidad para aprovechar críticamente y combinar los beneficios de todos los tipos de sistemas técnicos, tecnológicos y tecnocientíficos!, dijo.
El investigador, que recibió el Premio de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias en 1988, señaló que el fortalecimiento de la ciencia y la tecnología no es por sí solo suficiente para el desarrollo social, ya que es necesario articular los sistemas científicos, tecnológicos y tecnocientíficos con el resto de la sociedad, de manera que los diferentes grupos se apropien críticamente del conocimiento y lo utilicen en su beneficio por medio de las diferentes prácticas.
¡Para lograr eso, tendríamos que pensar en lo que se podría llamar Redes Socioculturales de Innovación, que serían redes en las que participarían miembros de comunidades de expertos de todas las áreas del conocimiento; gestores (que tendrían como tarea atraer fondos de inversión y su eficiente administración(, y mediadores entre los diferentes sectores sociales involucrados!, afirmó.
Acerca de la figura de los mediadores, Olivé aseguró tendrían que llevar mensajes desde las comunidades científicas y tecnológicas al resto de los sectores de la sociedad, pero también deberán ser capaces de llevar demandas de esos grupos sociales a la comunidad científica.
León Olivé es licenciado en Matemáticas y maestro en Filosofía por la UNAM, y doctor en Filosofía de la Ciencia por la Universidad de Oxford, Inglaterra. Es investigador del Instituto de Filosofía de la UNAM desde 1985. Trabaja en las áreas de Filosofía de la Ciencia, Epistemología y Filosofía Política y Social.
Sus libros más recientes son: Interculturalismo y Justicia Social (México, UNAM, 2004); El Bien, el Mal y la Razón. Facetas de la ciencia y la tecnología (México, Paidós-UNAM, 2000); Multiculturalismo y Pluralismo (México, Paidós-UNAM, 1999).
Es miembro del Comité Académico de la Cátedra México Ciencia, Tecnología, Sociedad e Innovación de la Organización de Estados Iberoamericanos. Recibió el Premio de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias en 1988 y es miembro del Sistema Nacional de Investigadores de México.