Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/257/17
Ciudad de México, 18 de noviembre de 2017
- El trabajo que habrá de realizarse durante los próximos meses será a través de diez mesas, cada una con un tema, y el documento que resulte tras este proceso se presentará en marzo a autoridades y actores políticos.
- Reunidos en la Unidad de Seminarios de la UNAM, el rector Enrique Graue encabezó el jueves pasado la primera sesión de trabajo del «Hacia una Consolidación y Desarrollo de Políticas Públicas en Ciencia, Tecnología e Innovación», un ejercicio que busca concretar un documento que sirva de directriz a la próxima administración federal para su política en materia de ciencia, tecnología e innovación.
Foto: Elizabeth Ruiz Jaimes/AMC.
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Por segunda ocasión, la Academia Mexicana de Ciencias ha sido invitada para participar junto a otras 66 instituciones de los sectores público, social y privado, vinculados con el sistema de ciencia, tecnología e innovación (CTI) de nuestro país, para construir y diseñar una agenda que encauce la política de CTI de la siguiente administración federal.
Convocados por el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Enrique Graue, a la primera reunión de trabajo de este ejercicio denominado “Hacia la Consolidación y Desarrollo de Políticas Públicas en Ciencia, Tecnología e Innovación”, los titulares de centros de educación superior, de investigación, academias, asociaciones, cámaras y líderes empresariales comenzaron a exponer, revisar y discutir diversos aspectos tendientes a elaborar una serie de planteamientos que deberán quedar plasmados en un documento que será presentado a los candidatos presidenciales con el objetivo de que formulen compromisos en torno a la propuesta elaborada por la comunidad de CTI del país.
Este esfuerzo da continuidad al que hizo hace cinco años (Hacia una Agenda Nacional en Ciencia Tecnología e Innovación) un amplio grupo convocado por el entonces rector de la UNAM José Narro, para hacer una serie de propuestas que ayudaran a fortalecer el sector de CTI de cara a la siguiente administración federal. Al final, dicha agenda ayudó principalmente para la elaboración del Programa Especial de Ciencia Tecnología e Innovación (PECiTI), reflejado en el Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018.
José Luis Morán, presidente de la AMC, reconoció la relevancia y el impacto que tuvo el documento pasado, pero consideró “aún más relevante reunirnos para hacer un ejercicio similar, esto nos permite no partir de cero, obviamente hay una base fuerte con algunos programas que ya se realizaron y será la parte fundamental sobre la cual se harán propuestas adicionales, sobre qué nos gustaría que estuviese en ese nuevo documento, qué es lo que creemos necesario para que nuestro país avance en materia de CTI”.
Entre los puntos que abordó Morán en su intervención, uno fue sobre tener un financiamiento adecuado para las actividades de CTI, y para ello evaluó necesario contar con el apoyo y convencimiento del Ejecutivo y sus secretarías de Estado al momento de elaborar una propuesta original al presupuesto y, por otro, contar con la convicción del Congreso de la Unión para que realice modificaciones a la propuesta federal, si lo considera adecuado.
Morán también hizo saber que coincidía con otro participante en la sesión, el subsecretario de Educación Superior de la SEP, Salvador Jara, sobre la importancia de mejorar el nivel educativo. “(Jara) nos hizo notar que la educación que ofrecemos a nuestros niños es deficiente, que la forma en que los educamos en lugar de incentivarlos para que sean críticos, analíticos y propositivos y eventualmente tengamos buenos ciudadanos, no es la que están recibiendo”.
En ese contexto, el presidente de la AMC recordó que la Academia colabora con la SEP para redefinir la currícula de los maestros, ya que muchas veces la manera en que se instruye a los profesores no es la conveniente, porque se les pide inculquen a sus alumnos cuestiones relativas a la ciencia cuando ellos no han tenido esa oportunidad en su formación.
En la reunión que tuvo lugar el jueves pasado en la Unidad de Seminarios Ignacio Chávez participaron como oradores, además del rector Enrique Graue, el director general de Asuntos de Personal Académico de la UNAM, Carlos Arámburu; el presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Diputados, Carlos Gutiérrez; el director adjunto de Planeación y Evaluación del Conacyt, Víctor Carreón; el coordinador de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Oficina de la Presidencia, Elías Micha; el director general del Instituto Politécnico Nacional, Enrique Fernández Fassnacht; el secretario general ejecutivo de la Asociación de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), Jaime Valls.
Otras de las problemáticas que retomó José Luis Morán ante el nutrido grupo de invitados, es la tendencia de recorte al presupuesto destinado a las actividades de CTI. “Si se observa la inversión del gobierno federal en el sector se ven los ciclos, al principio va bien, pero al final de sexenio siempre decae. Eso trae como consecuencia que se estanquen las metas que se proponen originalmente cuando la administración en turno empieza”.
Para subsanar esta situación, comentó que se ha propuesto realizar una modificación a la estructura del Conacyt, que se considere el periodo de gestión del director general para que éste no sea de seis años. “Hay una propuesta de que sea mayor, nuestra sugerencia es que el nombramiento sea en años impares para que no coincida con el inicio de una nueva administración federal; parte de los beneficios que se lograrían con estos cambios sería darle a Consejo más autonomía e independencia, dotarlo de recursos que no sean anuales, ya que maneja programas plurianuales como son las becas y el SNI, por ejemplo”.
José Luis Morán resaltó también que uno de los programas más importantes que se desarrollaron en este sexenio, que se debe cuidar y mantener, es el de Cátedras para Jóvenes Investigadores de Conacyt. “Ese tipo de iniciativas fueron las que se implementaron y deberán estar en las recomendaciones del próximo documento.
“La Academia Mexicana de Ciencias está convencida de que si no hay ciencia básica, no hay nada qué aplicar. Estaremos siempre propugnando para que haya un fondo específico, sustancial, para ciencia básica”, indicó.
El diseño de estrategias para que los investigadores tengan un retiro digno de las actividades académicas, que permitan abrir espacios para que la gente joven se siga formando, es una situación que Morán recomendó atender de manera especial, así como brindar un apoyo más decidido a los estados para que se desarrollen en forma similar y aprovechen la situación geográfica que tienen.
“Conacyt creó agendas específicas que identifican las ventajas que tiene cada uno de los estados dependiendo de su entorno. Esto esfuerzo debe estar acompañado por un fondo para repartir entre los diferentes estados, ello propiciará un desarrollo acelerado y no puedo estar más de acuerdo con esta propuesta. Uno de mis intereses particulares es que el país se desarrolle en su conjunto”, planteó.
En la reunión también tomaron la palabra el rector general de la Universidad de Guadalajara, Tonatiuh Bravo Padilla; el presidente de la Comisión de Innovación del Consejo Coordinador Empresarial, Víctor Gutiérrez; David Garza, rector del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey; el coordinador del Foro Consultivo Científico y Tecnológico, José Franco; el coordinador del Consejo Consultivo de Ciencias, Arturo Menchaca; y el presidente de la Asociación Mexicana de Directivos de la Investigación Aplicada y el Desarrollo Tecnológico (ADIAT), Juan Manuel Romero.
Fabiola Trelles Ramírez.