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Boletín AMC/069/09
México, D. F., 2 de junio de 2009
- Rosaura Ruiz Gutiérrez propuso una reforma fiscal progresiva y la renegociación del pago del Fobaproa para financiar el rescate de la ciencia y la tecnología
- Al inaugurar el 50 Año Académico de la AMC, Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública, refrendó el compromiso del gobierno federal con la educación de calidad y el impulso de la ciencia y la tecnología como vía para el desarrollo de México
- La presidenta de la Academia se pronunció por crear una nueva generación de investigadores y la consolidación de las instituciones públicas que realizan investigación
- Rosaura Ruiz, presidenta de la AMC, propuso al Ejecutivo un Programa de Rescate Financiero para la Ciencia y la Tecnología, en la ceremonia de inicio del 50 Año Académico de este organismo.
Foto: AMC
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Tanto la crisis económica como la emergencia sanitaria provocada por la epidemia de la influenza AH1N1, han hecho evidente la vulnerabilidad de nuestro sistema nacional de salud y del estado en que se encuentran la investigación científica y el desarrollo tecnológico. La lección es clara: de no fortalecer las capacidades institucionales del país que permitan enfrentar próximas emergencias sanitarias con eficacia y celeridad, podemos pasar de un problema de salud pública a uno de seguridad nacional.
Así lo manifestó Rosaura Ruiz Gutiérrez, presidenta de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), en su mensaje con motivo del inicio del 50 Año Académico de este organismo, donde propuso al Gobierno Federal poner en marcha un Programa de Rescate de la Ciencia y la Tecnología, tal como lo hizo con el sistema bancario, mediante el Fobaproa-IPAB, y con las empresas privadas constructoras de proyectos carreteros fallidos.
Tras señalar que el rescate de la ciencia y la tecnología es financieramente viable, recordó que en esos rescates el Estado mexicano destinó, entre 1995 y 2008, recursos públicos por un monto de 453 mil millones de pesos. En promedio, cada año, dichos rescates le han costado al país erogaciones equivalentes a 0.59% del PIB. En este mismo periodo a ciencia y tecnología se le destinó, anualmente, en promedio, 0.37% del PIB.
Para rescatar a la ciencia y la tecnología propuso partir del mismo principio aplicado por el gobierno mexicano en el rescate bancario; esto es, conferir dentro del presupuesto federal una alta prioridad al financiamiento, en este caso, de la investigación científica y del desarrollo tecnológico.
En un acto celebrado en el Auditorio Galileo Galilei de la AMC, aseguró que para blindar la política científica y tecnológica frente a coyunturas económicas y políticas sexenales, México requiere asumir un gran acuerdo nacional para establecer un mecanismo que combine dos instrumentos:
Una reforma fiscal progresiva para incrementar progresivamente las tasas de los estratos de mayores ingresos, así como la creación de un impuesto que grave las ganancias de capital, particularmente por las operaciones en el mercado de valores, como lo hacen los países más industrializados. Ambos mecanismos permitirían que las empresas y personas que mayores beneficios económicos obtienen en el país, contribuyan en la misma medida a su desarrollo, consideró.
Por otra parte, la presidenta de la AMC planteó la renegociación del pago del rescate bancario, a fin de reducir y recalendarizar los pagos por amortización del saldo de dicha deuda, que actualmente asciende a 752 mil millones de pesos.
Precisó que la estrategia de rescate de la ciencia y la tecnología incluye aplicar dichos recursos, con la mayor eficiencia y transparencia, a la consolidación de las instituciones de educación superior e investigación así como a la creación de nuevos centros.
Asimismo, hizo énfasis en la urgente necesidad de la creación de nuevas plazas que favorezcan la consolidación de una nueva generación de investigadores pues, recordó, el promedio de edad de los miembros del SNI es de 63 años, es decir, cercano a la edad de jubilación, y el de los candidatos a Investigador Nacional de 38 años, una edad en que, en los países desarrollados, un investigador ya está consolidado y en plena etapa productiva, puntualizó.
Ruiz Gutiérrez reconoció el compromiso anunciado recientemente por el Presidente Felipe Calderón de no reducir la inversión en ciencia y tecnología y de impulsar la educación científica y tecnológica entre los jóvenes, haciendo eco de los reiterados planteamientos de la AMC, así como de instituciones como la ANUIES.
Para consolidar ese planteamiento, indicó Rosaura Ruiz, es imperativo alcanzar un compromiso entre el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo, los gobiernos estatales y las instituciones de investigación y educación superior, que conduzca al cumplimiento, en el menor plazo posible, de la Ley de Ciencia y Tecnología que desde 2001, obliga al Estado mexicano a destinar un presupuesto público para investigación científica equivalente a 1 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB).
Subrayó que el presupuesto federal para ciencia y tecnología aprobado para 2009 equivale a 0.36% del PIB y precisó que, de mantenerse las actuales tendencias de la economía y del gasto público destinado a ciencia y tecnología, México alcanzará la meta del 1 por ciento del PIB en el año 2042.
En cambio, continuó, cumplir el mandato de ley en 2012, requiere que en los próximos tres años el Estado mexicano incremente el gasto público en ciencia y tecnología en casi 90 mil millones de pesos, lo que equivale a 30 mil millones de pesos más cada año.
En otro escenario alternativo podría establecerse un compromiso político de Estado, para cumplir, finalmente, con el mandato de ley, a más tardar, en el año 2018. Ello implica incrementar, cada año en promedio y durante los próximos nueve años, el presupuesto público para ciencia y tecnología (federal + estatal), en 12 mil 700 millones de pesos. Tal esfuerzo equivaldría a incrementar el presupuesto público para ciencia y tecnología en sólo 0.07% del PIB de cada año, puntualizó.
RATIFICA EL GOBIERNO FEDERAL SU COMPROMISO CON LA CIENCIA
En su mensaje previo a realizar la declaratoria inaugural del 50 Año Académico de la AMC, el, Secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio Irazábal, señaló que la ciencia y la tecnología son fundamentales para impulsar el desarrollo de México, ya que su avance contribuye al crecimiento de la economía y a su competitividad, así como al mejoramiento del medio ambiente.
“Hoy vengo aquí a refrendar el compromiso del Presidente Felipe Calderón con la educación de calidad y el impulso de las ciencias y la tecnología como la vía más segura para garantizar la sustentabilidad de nuestro desarrollo y el mejor porvenir para todos los mexicanos”, enfatizó.
Asimismo, felicitó a la Academia Mexicana de Ciencias, institución que cumple medio siglo de ser puente entre la comunidad científica, las instituciones de gobierno y la sociedad, y una importante aliada de la educación de calidad en México, tal como lo demuestra la relación de colaboración que desde hace varios años mantiene con la SEP, señaló.
INICIO DEL 50 AÑO ACADÉMICO
Más adelante, José Franco López, secretario del Consejo Directivo de la AMC, dio la bienvenida a los 58 nuevos miembros que ingresaron a la Academia en 2008, así como a los ocho nuevos miembros correspondientes (investigadores extranjeros o que se desarrollan en instituciones de otras partes del mundo, que han realizado aportaciones a la ciencia mexicana).
Por su parte, Patricia Talamás Rohana y Teresa Rojas Rabiela, secretaria y tesorera de la AMC, respectivamente, entregaron los Premios Weizmann y Weizmann-Kahn 2008 a Ana Lilia González Ronquillo, en Ciencias Exactas; Iván Moreno Andrade, en Ingeniería y Tecnología; y Andrea Sachi Díaz Villaseñor, en Ciencias Naturales.
Asimismo, hicieron entrega de los Premios de la Academia a las mejores tesis de doctorado a José de Jesús Hernández López y Johann Philipp Hillenbrand, en la categoría de Ciencias Sociales, así como a Daniel Alejandro Kersffeld Demner y Susana Luisa Sosenski Correa, en el área de Humanidades.
A esta ceremonia asistieron José Lema Labadie, Rector General de la Universidad Autónoma Metropolitana; Rafael López Castañares, Secretario General Ejecutivo de la ANUIES, Adolfo Martínez Palomo, Coordinador General del Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República; Juan Pedro Laclette San Román, Coordinador General del Foro Consultivo Científico y Tecnológico, y Francisco Javier Castellón Fonseca, Presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología del Senado de la República.
Igualmente, estuvieron presentes Manuel Ruiz de Chávez, Presidente de la Academia Nacional de Medicina de México; Esther Orozco Orozco, Directora del Instituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal; Manuel Ordorica, Secretario Académico de El Colegio de México; Stella Rayek, ex presidenta de la Asociación Mexicana de Amigos del Instituto Weizmann de Ciencias, y René Asomoza Palacios, Director General del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional.
En el marco del inicio del 50 Año Académico de la AMC, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, José Narro Robles, impartió la conferencia magistral “La desigualdad en México: un reto para la ciencia y la educación”.
Por la tarde, tuvo lugar el Foro “Un análisis integral de la Influenza AH1N1”, organizado por la Academia Mexicana de Ciencias, la Academia Nacional de Medicina, la UNAM y el CINVESTAV.
Estas actividades marcan el inicio de la celebración por el 50 Aniversario de la Academia Mexicana de Ciencias, cuyo lema es Ciencia para el desarrollo y la equidad de México.