Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/316/12
México, D.F., 4 de diciembre de 2012
- Las contribuciones del investigador francés a la ciencia mexicana son de suma importancia, dice José Franco
- La escuela mexicana de control automático le debe mucho a Moog, reconoce René Asomoza
- El doctor Claude Moog, nuevo Miembro Correspondiente de la Academia Mexicana de Ciencias.
Foto: Luis Contreras/AMC.
Imagen en alta resolución
Hoy es una fecha muy especial para mí, me siento muy emocionado y honrado, porque no somos muchos los miembros correspondientes de Francia en la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), sobre todo, en la especialidad científica a la que pertenezco, que son matemáticas aplicadas a la ingeniería, dijo Claude Moog, en ocasión de su ingreso a la Academia.
Regresar a este país –agregó en entrevista- es un gran placer, lo visito desde hace más de dos décadas al menos una vez por año. Nuestra historia es muy antigua y tengo colegas franceses de otras universidades que vienen a México, por lo que los lazos también son de amistad. Después de algunos años, el 40 por ciento de los profesores mexicanos en investigación en control automático hacen su doctorado en Francia. Nuestros vínculos son muy fuertes e importantes en control automático e ingeniería eléctrica.
La ceremonia de ingreso se llevó a cabo en el auditorio del Departamento de Ingeniería Eléctrica del Centro de Investigación y Estudios Avanzados, Cinvestav-IPN, con la presencia del director de la institución, René Asomoza; el presidente de la AMC, José Franco, el investigador anfitrión Rafael Castro, y Thierry Boissons, agregado científico de la Embajada de Francia en México.
Asomoza, quien realizó la bienvenida, sostuvo que el caso del doctor Moog destaca porque la escuela mexicana de control automático, que está diseminada en varias instituciones por todo el país, le debe mucho a la escuela francesa y a él como uno de los protagonistas. “Me congratula que la Academia Mexicana de Ciencias haga este reconocimiento y agradezco la distinción que nos hacen y que se haya llevado en las instalaciones del Cinvestav”.
Después de escuchar la semblanza de Claude Moog en voz de Rafael Castro, José Franco encabezó el acto protocolario e hizo entrega del diploma que acredita al científico galo como nuevo Miembro Correspondiente de la AMC.
Franco explicó que a través de la figura de Miembro Correspondiente la Academia Mexicana de Ciencias reconoce la obra de aquellos investigadores extranjeros que, además de haber destacado en su campo de trabajo, han contribuido de manera importante al desarrollo de la ciencia mexicana.
“Su activa labor y dedicación en eventos franco-mexicanos, aunada a sus contribuciones de reconocido prestigio internacional, resultan, sin duda, en una fuente de suma importancia para el desarrollo de la ciencia mexicana, en particular, en el campo del control automático, en el que ha sido merecedor de importantes reconocimientos”, expresó.
Rafael Castro destacó por su parte, que para el medio científico al que pertenece es importante el ingreso del doctor Moog a la Academia, ya que esta colaboración entre México y Francia, que inició a principios de los años 90, ha permitido además del intercambio científico y académico, la integración de recursos humanos, permitiendo con ello formar a varios estudiantes mexicanos que hoy son investigadores en nuestro país.
“Moog ha fomentado bastante este intercambio, se ha interesado en él y lo ha mantenido durante por muchos años, esto es de importancia significativa”, consideró Castro Linares, quien agregó que se han dado cuenta que hay muchos colegas extranjeros con los que han tenido colaboración los investigadores mexicanos.
“Por ello, nos ha interesado mucho la membresía de Moog, porque es una expresión de reconocimiento de la labor que ha hecho para seguir y continuar esta colaboración que se ha mantenido en excelente nivel y sigue fresca”.
Claude Moog ofreció la conferencia “La Estructura Algebráica en Sistemas de Control no Lineales”, ante un auditorio en su mayoría integrado por estudiantes del Cinvestav. Al término de ésta comentó que los sistemas de investigación en esta área son similares entre México y Francia. “Quizá es mi país sea más teórica y aquí más experimental”.
Pienso que mi ingreso a la Academia Mexicana de Ciencias –dijo- posibilitará hacer nuevos e importantes proyectos para el futuro. Por lo pronto es de destacar que este intercambio últimamente es mejor que hace 20 años, porque ahora los estudiantes mexicanos tienen un doctorado franco-mexicano, al pasar por partes iguales su especialización en Francia y en México, esa es la diferencia en este nuevo siglo.
Fabiola Trelles Ramírez