Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/211/17
San Luis Potosí, San Luis Potosí., 6 de octubre de 2017
- El director del Conacyt indica que la innovación es una cadena en la que intervienen distintos sectores y que al final del proceso innovador se genera riqueza para la sociedad.
- Generar valor a partir del conocimiento permite llevar bienestar a la sociedad y tener mayor capacidad de invertir nuevamente en la ciencia y el conocimiento, sostuvo en conferencia magistral Enrique Cabrero Mendoza, director general del Conacyt, en el Centro Cultural de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
Foto: Luisa Fernanda González Arribas/Conacyt.
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En la actualidad no existe un caso de éxito de un país que tenga sólo inversión pública destinada a la ciencia y la tecnología. En Corea del sur el 75% de la inversión en ciencia y tecnología la realiza el sector privado, en Japón el 70% y en Estados unidos el 68%, por lo que uno de los retos para México es impulsar a las empresas a innovar, dijo Enrique Cabrero Mendoza, director general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
En el marco del 90 aniversario de la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASPL), Cabrero Mendoza ofreció la conferencia “La innovación y la competitividad en las organizaciones”, en la que aseguró que la innovación puede transformar el conocimiento en riqueza.
“Una vez que el conocimiento se transforma en algo útil para el sector productivo, las empresas y la economía del país, se genera otro tipo de valor que está representado por el bienestar social, el crecimiento económico y la competitividad; y a medida que generamos este valor tenemos mayor capacidad de invertir en conocimiento y ciencia”, detalló.
La innovación, de acuerdo con el también integrante de la Academia Mexicana de Ciencias, es parte de una cadena de conocimiento que empieza en los laboratorios, continúa con la investigación experimental, pasa por el desarrollo tecnológico y la investigación aplicada; y posteriormente llega a la etapa en donde científicos, empresarios, tecnólogos y profesionistas le dan el último giro al proceso innovador, con lo que se genera riqueza para la sociedad.
“Existen diversos tipos de innovación, la que tiene como resultado un servicio o producto mejorado, la que se aplica a los procesos de producción y la que incluye nuevos métodos de comercialización de productos y servicios”, describió Cabrero ante un auditorio colmado de universitarios y académicos del Centro Cultural Universitario Bicentenario de la UASPL, la tarde de ayer jueves.
El director general del Conacyt indicó que en lo que se refiere a las capacidades de innovación y competitividad de México, el país no se encuentra en el lugar en el que tendría que estar, aunque de acuerdo con el Índice de Competitividad Global ha subido siete lugares para ubicarse en el sitio 51, una situación que cambia en el Índice Mundial de Innovación, ranking en el que ha dado un salto del puesto 79 al 58.
Enrique Cabrero señaló al Programa Estímulos a la Innovación como una de las acciones que se han implementado desde el Conacyt para fomentar la innovación en el país. “A través de este programa se evalúan propuestas que hacen las empresas y se les dan recursos con la condición de que la empresa ponga otro tanto. Es un programa en el que se ha dado apoyo a 5 mil 965 proyectos de 2009 a 2017.
Otra de las iniciativas del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología relacionada con la innovación y las empresas es el de incentivos fiscales, que inició este año y cuya dinámica consiste en que si las empresas invierten en laboratorios, equipamiento y contratan personal calificado, se les otorga un 30% de reducción fiscal.
Las Agendas de Innovación
Son como un traje a la medida para los estados. El Conacyt diseñó las Agendas de Innovación tomando en cuenta que cada entidad es diferente y posee determinadas condiciones que le pueden ayudar a tener éxito en ciertos sectores. “Hicimos un diagnóstico en cada estado y definimos su agenda, examinamos el potencial en sectores como el aeroespacial o de energía sustentable”.
La Agenda de Innovación de San Luis Potosí se enfoca en tres sectores: automotriz, agroalimentario y energía sustentable; además, el estado cuenta con capital humano altamente calificado, destacó Cabrero, lo que lo vuelve de interés para la inversión. “A la fecha, son mil 416 los becarios de Conacyt del estado de San Luis Potosí, y 693 investigadores potosinos son parte del Sistema Nacional de Investigadores”.
El Programa de Estímulos a la Innovación ha sido exitoso en el estado donde se han apoyados diversos proyectos con aproximadamente 800 millones de pesos.
Enrique Cabrero Mendoza consideró que para que el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación se cristalice en México, se necesita un plan con una visión a largo plazo, políticas públicas de innovación articuladas entre diferentes financiadores, y una intensa y amplia promoción de una cultura de la innovación.
Noemí Rodríguez González.