Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/64/06
México, D.F., martes 26 de diciembre de 2006
- Protesta la institución por la disminución al sector, ratificado por la
Cámara de Diputados
- La Ley de Ciencia y Tecnología obliga al Estado a destinar el 1 por ciento del PIB a este rubro.
Foto: Crestomatía. Tomada de www.consumer.es
Nuevamente, el presupuesto destinado a la inversión en ciencia y tecnología ha sido recortado para el 2007, en esta ocasión con 835 millones de pesos, lo que representa una disminución del 2.7 por ciento respecto al 2006 y que, junto con la inflación esperada para el próximo año, implica una disminución en términos reales de 5.7 por ciento.
Si bien la Academia Mexicana de Ciencias considera positiva la reasignación de recursos para educación y cultura que realizó la Cámara de Diputados al Proyecto de Presupuesto de Egresos 2007, al mismo tiempo manifiesta su desacuerdo con la falta de incremento a los montos para la ciencia y la tecnología, que permanecieron tal y como lo propuso el Ejecutivo Federal.
Algo similar ha venido ocurriendo a lo largo de los últimos seis años, en los que paulatinamente se disminuyó la inversión del estado mexicano en ciencia y tecnología, de 0.42 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2000, a 0.37 por ciento en 2006. Con esta nueva disminución quedará en 0.35 por ciento para el año entrante (29 mil 764 millones de pesos), que representa uno de los niveles más bajos de los últimos 20 años.
Al recorte hay que agregar el déficit de 600 millones de pesos que se tuvo durante 2006 en el Fondo Sectorial SEP-CONACYT para ciencia básica, y la precaria situación de los Centros CONACYT Âcomo el Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica, el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada, el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo, el Instituto Nacional de Astrofísica, í“ptica y Electrónica, El Colegio de la Frontera Norte, entre otrosÂ, que han sufrido disminuciones en su presupuesto, en detrimento de su trabajo dirigido al desarrollo de sus respectivas regiones en el país.
La Academia Mexicana de Ciencias, que aglutina a más de mil 800 científicos de todos los campos del conocimiento y de todo el país, expresa su más enérgica protesta por la falta de consideración hacia este sector estratégico para el desarrollo y el crecimiento nacionales.
Esta medida, es contraria a la Ley de Ciencia y Tecnología, vigente desde 2004, que obliga al Estado mexicano a destinar el 1 por ciento del PIB a este rubro.
Asimismo, es contraria a las recomendaciones de organismos internacionales tales como la UNESCO, la OCDE y el Banco Mundial, que sugieren invertir entre el 1 y el 1.5 por ciento del PIB en ciencia tecnología e innovación para impulsar el crecimiento económico de naciones en desarrollo.
Hacemos un llamado a los poderes ejecutivo y legislativo, y a la sociedad en su conjunto, para que en el futuro se inviertan mayores recursos en pro de la generación de conocimiento y de la innovación tecnológica, que representan la mejor vía para impulsar el desarrollo nacional y para resolver muchos de los problemas más acuciantes que padece nuestro país. De no hacerlo, se pondrá en riesgo la seguridad nacional y el futuro de nuestra población.