La Jornada
3 de junio de 2011
Laura Poy Solano
Rinde el Cinvestav homenaje póstumo al fundador de su departamento de matemáticas
El investigador «influyó en la formación de millones de mexicanos» al coordinar su materia en los libros de texto gratuitos, se refirió en la ceremonia
Falleció en octubre del año pasado
Viernes 3 de junio de 2011, p. 2
Considerado como uno de los matemáticos más destacados en México por sus aportaciones al desarrollo de las matemáticas educativas, y con ello a la enseñanza de esta disciplina a millones de alumnos de educación básica en el país, pero también por sus aportaciones al conocimiento del cálculo infinitesimal, el Centro de Investigaciones y Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional rindió un homenaje póstumo a Carlos Ímaz Jahnke, investigador emérito de esta casa de estudios.
Ante la presencia de familiares e integrantes de la comunidad académica, Ricardo Cantoral, jefe del Departamento de Matemáticas, destacó que a lo largo de sus casi 60 años de trayectoria académica, Ímaz Jahnke, quien falleció en octubre pasado, fue un investigador “innovador y visionario”, no sólo en el Cinvestv, donde fundó el citado departamento, sino en distintas áreas e instituciones, pues a principio de la década de los 70 coordinó el grupo de matemáticas encargado del estudio y proyecto de los nacientes Colegios de Ciencias y Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Poco después, de 1972 a 1980, dirigió el área de matemáticas para los libros de texto gratuitos, con los que, aseguró Cantoral, “influyó en la formación de millones de mexicanos”, pues una de sus preocupaciones centrales fue la enseñanza de las matemáticas y la forma en que los docentes pueden impulsar su conocimiento. Los libros de texto elaborados con su supervisión fueron usados en más de 200 mil centros escolares de formación básica por más de una década.
Formación integral
Ímaz Jahnke, nació en Madrid, España, en 1932, de donde migró a los cinco años junto con sus padres, debido a la guerra civil española. Su madre, Hildegarde Jahnke, de origen alemán, y su padre, Eugenio Ímaz Echeverría, decidieron radicar en México durante el gobierno del general Lázaro Cárdenas del Río. Tras su llegada, Eugenio Ímaz, fílosofo y licenciado en derecho por la Universidad Central de Madrid, se incorporó como profesor en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM y participó en la constitución de la Junta de Cultura Española.
Años más tarde, Ímaz Jahnke estudió ingeniería civil y matemáticas en la UNAM, de donde egresó en 1955, para luego estudiar su maestría en Estados Unidos y un doctorado en la máxima casa de estudios. Su desarrollo profesional lo llevó a profundizar en la enseñanza del cálculo, ya como docente e investigador del Cinvestav, desde donde revolucionó la estructura del análisis matemático.
Reunidos en el auditorio José Adem, del Cinvestav, adonde asistieron el director general de esa casa de estudios, René Asomoza Palacios, y Telma Castro de Ímaz, investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la UNAM, quien recibió un reconocimiento en honor a la memoria del investigador, así como sus seis hijos y nietos, se destacó la importante labor de Ímaz Jahnke en la formación de nuevos científicos y matemáticos, así como en la divulgación de este campo del conocimiento.
Cantoral subrayó que “no sólo destacó por su importantes investigaciones en el campo del cálculo infinitesimal: también organizó actividades académicas y de divulgación en las que abrió la participación a jóvenes estudiantes e investigadores, como acto de compromiso con las nuevas generaciones, pero también de generosidad académica”, mediante congresos y encuentros regionales e internacionales de especialistas.
Como autor de artículos y libros especializados, Ímaz Jahnke destacó por sus aportaciones al campo de las matemáticas, en particular en su obra, en colaboración con el autor checo Zdenek Vorel, sobre Ecuaciones Diferenciales. Teoría del control, así como su texto de instroducción al cálculo.
En 2010 publicó, en colaboración con Luis Moreno, el libro La génesis y la enseñanza del cálculo, obra que se considera una de las aportaciones más brillantes a la discusión de este campo del saber.