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28 de abril de 2009
Jennifer Marcocchio
La fuga de cerebros es uno de los problemas más graves que sufre la ciencia en nuestro país, este fenómeno se debe a que las oportunidades son limitadas en México, por lo que Estados Unidos y Canadá reciben a los mexicanos especialistas de alto nivel.
El vicepresidente de la Academia Mexicana de Ciencias, doctor Octavio Paredes López, señaló que difícilmente al terminar una carrera en ciencias un estudiante puede encontrar cabida a sus aspiraciones en territorio nacional.
“Esto es uno de los problemas más graves, muy pocos científicos y genios se quedan por estos rumbos, por lo general emigran a Estados Unidos y Canadá”, señaló Paredes López durante su exposición ante Ejecutivos de Ventas y Mercadotecnia.
Y es que en la comida semanal de todos los lunes, el investigador de talla internacional enfatizó que es difícil desarrollarse en un lugar como nuestro país donde las oportunidades son escasas.
Sin embargo, dijo que es fundamental continuar con la labor de preparar a jóvenes interesados en el mundo de la ciencia a muy altos niveles para mejorar las condiciones de vida y transformar la forma de vida de la población.
Según sus estadísticas, en el Cinvestav se han formado 350 investigadores con una alta preparación, centenares de personas especializadas en áreas específicas, mientras que en la actualidad 100 jóvenes cursan estudios con miras a ser todos unos profesionales.
“Nosotros somos muy afortunados, los jóvenes han confiado en la calidad que mostramos y esto hace que el compromiso se agrande, que busquemos mayores grados y demostramos que aquí hay mucho qué aportar”, expuso el científico.
Agregó que los alumnos del Cinvestav provienen de diferentes estados y de países desarrollados.
“Aquí el nivel es a la par de cualquier lugar del mundo”, aseguró.