México, cangrejo de la ciencia: Mario Molina

Milenio Diario
5 de julio de 2007
Antimio Cruz

Conviene presionar al gobierno para que entienda bien el valor de la investigación. La SEP anuncia que las becas para rubros cientí­fico-tecnológicos serán más jugosas.

México está avanzando en sentido contrario en ciencia y tecnologí­a pues en lugar de incrementar los fondos económicos para investigación y aplicar el nuevo conocimiento a la solución de problemas cotidianos, cada vez se destina a esta área menor porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB), señaló Mario Molina, Premio Nobel de Quí­mica, en el 15 aniversario del Sistema de Centros de Investigación CONACYT.

Precisó que los cientí­ficos ya ni siquiera se ocupan de pedir que se incrementen los recursos para la ciencia, como habí­a ocurrido durante décadas; ahora se conforman con que no se les recorten los apoyos que tienen.

¡Estamos yéndonos en la dirección equivocada. No es que tengamos la urgencia de que se duplique el presupuesto de un año para otro, pero por lo menos que ya no esté disminuyendo!, apuntó el quí­mico mexicano.

El presupuesto gubernamental para la ciencia y la tecnologí­a en 2007 es de entre 0.35 y 0.37 por ciento del PIB, dependiendo del modo como se haga el cálculo, pero en ambos casos el porcentaje es el menor que se haya dado para la investigación en 20 años, según denunció la Academia Mexicana de Ciencias.

Molina dijo que ¡lo antes posible! la sociedad civil, el sector académico y el sector empresarial deben ejercer presión sobre el gobierno para que comprenda claramente que todos los paí­ses que han invertido en ciencia y tecnologí­a están experimentando hoy en dí­a un desarrollo económico vigoroso.

Añadió que el sacrificio económico no sólo es para beneficiar a la comunidad de cientí­ficos, pues podrí­a pensarse que se habla sólo a favor de un grupo minoritario, sino que de la investigación y la creación de nuevas tecnologí­as se beneficia toda la sociedad.

¡Un ejemplo muy claro de cómo se benefician muchas más personas que los cientí­ficos y los tecnólogos es el tema de la contaminación ambiental!, expresó el cientí­fico.

¡Es inevitable que muy pronto tengamos que invertir mucho en cambios para adoptar nuevas tecnologí­as limpias.

¡Esas tecnologí­as podrí­an ser desarrolladas por nosotros y beneficiar a muchos sectores, pero también es posible que si no ponemos atención perdamos esa oportunidad de desarrollo!.

El investigador que descubrió el impacto negativo de los gases de refrigeración llamados clorofluorocarbonos (CFC) sobre la capa estratosférica de ozono, dijo que una de las razones por las que se ha estancado y contraí­do el apoyo presupuestal a la ciencia y la tecnologí­a es porque hay una dura competencia con otras necesidades urgentes del paí­s y los impactos positivos de invertir en investigación no son evidentes para los polí­ticos en general.

¡Ocurre lo mismo que en educación, pues no se puede esperar que la inversión en educación dé resultados al año siguiente que se le destinan recursos!, concluyó.

En la misma ceremonia que conmemoró el 15 aniversario de la red que agrupa a 27 centros de investigación en ciencias naturales, sociales y exactas bajo el Sistema de Centros del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnologí­a, Josefina Vázquez Mota, secretaria de Educación Pública, informó que el próximo ciclo escolar se aumentarán las becas para estudiantes de bachilleratos de las ramas de ciencias naturales y exactas.

Además habrá más recursos de la SEP para estudiantes de licenciaturas cientí­ficas.

¡Todas aquellas becas Pronabes (Programa Nacional de Becas para la Educación Superior) que vayan a la formación cientí­fica y tecnológica tendrán incentivos de cuantí­a mayor que las becas Pronabes para carreras tradicionales como Derecho, Administración, Comunicación o Mercadotecnia, donde se concentran todaví­a seis de cada diez estudiantes de ecuación superior!, anunció Vázquez Mota.

La misma funcionaria dijo que el próximo ciclo escolar 2007-2008 se buscará duplicar el número de niños de educación primaria que han participado en el programa llamado Sistema de Enseñanza Vivencial e Indagatoria de la Ciencia (Sivec), en el cual han tomado parte 250 mil niños, financiados por la SEP, los gobiernos estatales y asesorados por coordinados por la Fundación Innovación en la Enseñanza de la Ciencia (Innovec), en la que participa Mario Molina.

Este programa ya ha sido probado exitosamente en Nuevo León, Hidalgo y Querétaro.

Para el periodo 2008-2009 se buscarí­a que fuera un millón de niños los que participen en este programa.

La titular de la SEP también anunció que en los próximos meses se comenzará a trabajar con cientí­ficos para producir un libro de ciencias que se incluya dentro del conjunto de libros de texto gratuitos que anualmente se entregan a los niños de educación primaria. El libro buscarí­a despertar vocaciones tempranas para producir muchos cientí­ficos.

Riesgos y oportunidades

• El mexicano Mario Molina dijo que los cientí­ficos mexicanos ya no sólo piden que se les apoye con más recursos; se conforman con que no les recorten más.

• Si no se apoya a los cientí­ficos del paí­s, dijo Molina, pueden perderse áreas de desarrollo para los mexicanos, como la creación de tecnologí­as limpias.

• La Secretarí­a de Educación Pública dijo que el gobierno apoyará con más becas a estudiantes de bachillerato y licenciatura enfocados a ciencia y tecnologí­a.

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