La Crónica de Hoy
20 de septiembre de 2006
Raúl Cruz de Jesús
Mauricio Terrones Maldonado, científico del Instituto Potosino de Investigación en Ciencia y Tecnología, (IPICYT) recibió el premio TWAS Prize in Engineering Sciences, for 2005, por sus contribuciones en la síntesis y caracterización de nuevos nanomateriales basados en carbono.
El científico logró producir nanotubos (mil millones de veces más pequeño que un átomo de carbono, un balón de futbol comparado con la Tierra) de carbono con poco nitrógeno. ¡Estos se pueden utilizar en inmovilizadores de proteínas, emisores de electrones (fabricación de pantallas de televisión ultradelgadas con bajos consumos energéticos y de alta definición, mejores a las actuales), en la fabricación de compuestos poliméricos reforzados, como sensores muy eficientes de gases tóxicos, como soportes para depositar partículas metálicas diversas, y muchas otras aplicaciones!, explicó Terrones Maldonado, quien se convirtió en el científico más joven, con 37 años de edad, en recibir este premio.
Desde Oslo, Noruega, cuenta a Crónica que tiene más de 10 años dedicándose a la producción de nanotubos de carbono ¡comencé a realizar investigación desde 1992 con mi tesis de licenciatura, conjuntamente con mi hermano Guillermo (quien actualmente es investigador en EU) y después durante mi doctorado de 1994 a 1997, inicié con los nanotubnos, justo cuando estos surgían gracias al grupo de Harold Kroto —Premio Nobel de Química 1996—!.
El científico, egresado de la Universidad Iberoamericana, confiesa que ¡empecé pruduciendo nanotubos de c3n4, pero accidentalmente encontré que los tubos que producía eran de c98n2, es decir, que tenían muy poco nitrógeno! y que ofrecían las ventajas ya descritas.
Reconocimiento. La Academia de Ciencias del Mundo en Desarrollo (TWAS, por sus siglas en inglés), es una organización autónoma internacional, fundada por un grupo de científicos encabezados por el Abdus Salam, Premio Nobel de Física, y agrupa a científicos de más de 60 países en desarrollo.
Al hablar de premio obtenido, Terrrones Maldonado señala que es un gran reconocimiento y se muestra orgulloso de ser el científico más joven en obtenerlo ¡esto demuestra que hoy en día no es necesario tener más de 45 o 50 años para recibir una distinción y que los jóvenes investigadores tenemos posibilidades de impulsar la ciencia y la tecnología en épocas tempranas!.
¡El mundo se ha vuelto más competitivo y veremos muy pronto que esto sucede más frecuentemente!, indica.
El también integrante del Sistema Nacional de Investigadores revela una de sus formulas para el éxito ¡trabajo conjuntamente con mi hermano Humberto, nos complementamos. í‰l realiza más trabajo teórico y yo hago lo experimental y la caracterización de materias!.
¡Muchas veces tenemos ideas juntos y por ello trabajamos juntos, lo cual ha hecho a nuestro grupo de investigación de los mejores 20 en el mundo en lo que se refiere a la nanotecnologia del carbono!, subraya.
Y resume su interés por la ciencia y la tecnología ¡son áreas de curiosidad por saber el porqué de las cosas, y desde que era niño me pregunté varias cosas que ahora intento explicar!.
Reclamo. Para Terrones Maldonado es una lástima que aún con ejemplos como el suyo la ciencia en México no sea considerada en los niveles de gobierno como puente hacia el desarrollo.
¡La ciencia a través de los años no ha cambiado significativamente, ha estado prácticamente estancada, y no veo que vaya a cambiar. A ningún presidente le ha interesado apostarle a ella para desarrollar nuevos procesos, patentes mexicanas, industrias, empleos, más dinero, mejor nivel de vida, más productos mexicanos competitivos en el mercado, etc.! recalca.
¡Si México tuviera tecnología propia como Corea del Sur, seriamos otro país, pero esto no se da porque los políticos se preocupan primero por sus problemas, antes que los del país y del pueblo. Yo no veo que nada vaya a cambiar en la ciencia, independiente del partido que este en el poder!, puntualiza.
Y da el remedio ¡es necesario tener políticas de estado y no de gobierno para tener un apoyo decidido a la ciencia a largo plazo. Eso es una lástima, ya que existen muchos talentos mexicanos en el extranjero que no pueden regresar y tienen que buscar oportunidades en el exterior y por ende, nunca regresan a contribuir al desarrollo del país!.
Nanociencias, el camino del desarrollo en el futuro
¡México debe invertir en áreas estratégicas como las nanociencias en las que se cuenta con investigadores de alto nivel!, afirmó Sergio Ulloa, investigador mexicano de la Universidad de Ohio, durante su ingreso como miembro correspondiente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
¡Se requieren pocos recursos económicos para investigar cúmulos atómicos, láseres y diseñar métodos de síntesis de fibras de nanocarbono!, subrayo.
El físico considerado el especialista en materia condensada más reconocido a nivel mundial añadió que la interacción de las ciencias como Biología, Física y Química permite ahora diseñar nuevas técnicas de análisis para crear dispositivos más pequeños, como pueden ser computadoras cada vez más compactas y más económicas.
Y es que ¡lo que antes creíamos que era ciencia ficción, ahora con la nanociencia, definida como la convergencia natural de las ciencias y la tecnología en la escala de los nanómetros, podemos hacerlo realidad!.
El autor de más de 160 publicaciones especializadas mencionó que los estudios en este campo de la Física permite entender y controlar nuevos sistemas nanométricos de vanguardia, como ocurre con los llamados puntos cuánticos.
Ulloa ha estudiado la estructura electrónica de sistemas de baja dimensionalidad de superficies semiconductoras, sistemas electrónicos bidimensionales y puntos cuánticos, donde resolvió la correlación electrónica.
Rubén Barrera Pérez, investigador del Instituto de Física de la UNAM, señaló que la comunidad científica mexicana se ha olvidado de reconocer la presencia de científicos mexicanos en otros países. ¡Todavía no los valoramos como parte de nosotros, los vemos como aquellos que se fueron!, lamentó.