La Crónica de Hoy
27 de marzo de 2014
Isaac Torres Cruz
Academia
Por ser pionero en el desarrollo y creación de antivenenos de nueva generación en nuestro país –y que ya se exportan a todo el mundo-, Lourvial Possani obtuvo el Premio en Salud 2014 de la Fundación Carlos Slim. Junto con él, la organización internacional Medicus Mundi (en sus sedes de Bolivia, Guatemala y Perú), obtuvo el galardón en la categoría Institución Excepcional por su labor en el mejoramiento de la cobertura y atención sanitaria en estos países. Hoy se llevará a cabo la premiación en el Museo Soumaya.
En el acto de presentación de los ganadores del premio, Lourvial Possani, investigador del Instituto de Biotecnología (IBt) de la UNAM, recordó que el piquete de alacrán es un problema de salud pública que reporta 280 mil picaduras anuales en nuestro país. El miembro de la Academia Mexicana de Ciencias y ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes acotó el proceso de desarrollo de estos antivenenos faboterápicos, obtenidos de la inmunogénesis en suero de caballo, que a lo largo de cuatro décadas ha perfeccionado y ahora les ha permitido desarrollar una quinta generación de estos junto con la industria farmacéutica.
HUMANITARIOS. Por su misión humanitaria en la salud, Medicus Mundi en Bolivia, Guatemala y Perú obtuvo a su vez el galardón por coadyuvar a garantizar una cobertura efectiva y acceso equitativo a servicios de sanitarios a las poblaciones indígenas y de bajos recursos. La intervención regional de la organización ha permitido disminuir, en algunas de manera total, la mortandad infantil y materna.
“La organización brinda un modelo de componentes claves para la transformación de los sistemas de salud públicos de la población, así como dar asistencia técnica y transferencias tecnológica a ministerios de salud para mejorar su desempeño”, explicó Juan Carlos Verdugo, miembro de la organización en Guatemala.
“Que todos vayamos juntos, que nadie se quede atrás; que todos tengan todo, que a nadie le falte a algo —señala Fernando Carbone, de Medicus Bolivia, citando a sus ancestros aimaras—. Esa es una excelente receta para la crisis”.