Diario Monitor
Edgar González Santiago
Sábado 15 de enero
El rezago en ciencia y tecnología en el país es causado en mayor medida por la falta de inversión del sector privado en este rubro, pues aunque se otorgan estímulos fiscales a las empresas que invierten en desarrollo tecnológico, aún son muy pocas las que apoyan este sector (apenas mil 300 de un total de 30 mil), manifestó Jaime Parada ívila, director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
En conferencia de medios, precisó que con los mil 250 millones de pesos adicionales que otorgó la Cámara de Diputados al presupuesto para ciencia y tecnología, no habrá afectaciones a los programas de Fondos Mixtos y Fondos Sectoriales, mediante los cuales se apoyan los proyectos de investigación.
Ante las críticas hechas por la Academia Mexicana de Ciencias por el manejo «poco claro» del presupuesto en el Conacyt, pues argumenta que se dan apoyos a empresas transnacionales, como HP y General Motors, con lo que se deja de apoyar a pequeñas empresas mexicanas, Parada ívila dejó en claro que el organismo sólo puede autorizar apoyos, cuando los proyectos de investigación son autorizados por un órgano colegiado.
Indicó que no se trata de sostener una confrontación con otros organismos que se dedican a la ciencia, pues en este momento lo que más urge al país es que todos los sectores de la sociedad comprendan la importancia de este sector para que México tenga los niveles de competitividad que le generen progreso y desarrollo, para lo cual, aseveró, es necesario un acuerdo entre el gobierno y las fuerzas políticas.
Dijo que se requiere de acelerar el paso e invertir en capital humano, pues el Sistema Nacional de Investigadores está conformado tan sólo por 10 mil 904 científicos y tecnólogos, cantidad que es pequeña en proporción a la población que tiene el país, la cual asciende a más de 100 millones de habitantes. Explicó que el presupuesto que el gobierno destina para ciencia y tecnología en el país es de 28 mil millones de pesos, y dijo que con los recursos adicionales otorgados por los diputados federales al sector, así como otros recursos que aportan los gobiernos estatales, actualmente la inversión que tiene este rubro es de 0.4 por ciento del PIB.