La Crónica de Hoy
24 de mayo de 2010
Emilio Zebadúa
La educación debe estar ligada a los retos del país frente al actual entorno internacional. Las formas de enseñar, los métodos de aprendizaje han sufrido cambios. En un marco de transición a nivel mundial y regional se han instrumentado reformas para ofrecer una educación de mayor calidad. Han implicado cambios en los contenidos de los currículos tendientes a articular los contenidos, métodos y las propias estructuras de los sistemas escolares a las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación.
Los nuevos estándares de conocimientos precisan de una actualización, capacitación y formación de los docentes. Es crucial porque de esa manera contarán con las herramientas y podrán adecuarse a las tecnologías de la información y de la comunicación y la nuevas exigencias de los conocimientos. Hay una disposición al cambio, al aprendizaje permanente, la innovación en el salón de clases y la apertura a nuevos métodos y esquemas didácticos de enseñanza. En una palabra: saber más para enseñar mejor.
En nuestro país, por encima de los estándares internacionales, los maestros atienden a más alumnos de los que deberían conformar un grupo. Fuera de cualquier resultado, el magisterio está de acuerdo en que se debe evaluar al sistema educativo nacional. Pero que sea en su conjunto y no sólo a los maestros y alumnos. Los funcionarios federales y locales del servicio educativo deben —como lo están los docentes— estar sujetos a un examen de oposición para establecer si tienen el perfil profesional para administrar el buen funcionamiento del sistema educativo.
Hoy se reconoce que es indispensable vincular el desempeño de los maestros con el aprovechamiento de sus alumnos a un esquema de recompensas o sanciones. A partir de la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE) se está en la ruta para construir un Sistema Nacional de Evaluación que recoja toda esta problemática. Sin descalificaciones, sin hipotecar a las generaciones venideras
Pese a obstáculos y reticencias, el acuerdo educativo aflora resultados, en algunos casos parciales; en otros, sentando bases, por ejemplo, en el diseño curricular y la reforma de los planes de estudio en los tres niveles de la enseñanza básica; la reformulación de programas de superación académico-profesional del personal docente y la promoción de maestros a través de concursos de oposición.
El magisterio nacional ha asumido su compromiso por la educación. Ha propuesto el Calendario Escolar de 185 días a 200 días, la obligación de asignarle a la educación el ocho por ciento del Producto Interno Bruto, la obligatoriedad de los Consejos de Participación Social, el Programa Nacional de Carrera Magisterial, la creación del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación, la Ley General de los Derechos Lingüísticos de los Pueblos Indígenas, entre otras muchas propuestas que han tenido una significativo impacto en la educación nacional.
La fortaleza de la ACE radica en que la educación nacional debe estar liberada de cualquier compromiso de régimen político. ¿Por qué? Porque debe prevalecer en todo momento el derecho del individuo a una educación de calidad. El tiempo, entonces, resulta apremiante en las tareas de mediano y largo plazo para un acuerdo de esta naturaleza y alcance.
ALREDEDOR DEL PAÍS
Cambio de estafeta en la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).- El físico Arturo Menchaca, ex director del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) releva en la presidencia a Rosaura Ruiz, una voz calificada que desde su espacio abonó al debate público al mantener una línea discursiva a favor de que se cuente con una política de Estado en materia de desarrollo de la ciencia e innovación tecnológica. Ya en el marco de las candidaturas presidenciables, Menchaca ha señalado que buscará incidir en su agenda. El propósito: que haya un mayor financiamiento para estos sectores. Lo deseable, en tal sentido, es que el nuevo presidente de la AMC —como una voz más— avance en la formulación de sus objetivos, porque en gran medida la respuesta a nuestras problemáticas de salud, alimentación, medio ambiente, tecnologías de la información y comunicación, fuentes alternativas de energía, radica en la promoción del binomio ciencia-tecnología y el fomento de éstas desde los niveles básicos de nuestro sistema educativo, si es que se aspira a un Estado independiente, con mayores condiciones de igualdad social.
Uso de internet en México.- Como en muchas otras áreas de las tecnologías de la información y la comunicación, nos encontramos a la zaga de los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). Por ejemplo, en el uso de internet. Esto tiene una explicación: un estudio de ese organismo nos coloca como el quinto servicio más caro entre 30 economías medidas, con la salvedad de que en nuestro país se ofrece a los usuarios un servicio de acceso a la red con menor velocidad y banda ancha con menor capacidad; es decir, un servicio lento, pero con una oferta a alto costo. El precio del megabit por segundo (Mbps) es de 9.75 dólares, mientras que en Japón es de 0.14 dólares por Mbps. Al paso que vamos difícilmente se podrá cerrar la brecha digital que separa a nuestro país de las naciones con las que mantenemos acuerdos comerciales. En porcentaje, los hogares de los países de la OCDE tienen una conexión a internet del 62%, mientras que en México el promedio es de 18.4%.
Chihuahua.- En el marco de la Cátedra Internacional de Políticas “Antonio Ortiz Mena” organizada por la Secretaría de Educación y Cultura de la entidad, se llevó a cabo el coloquio “Educación en México: Respuestas contundentes a preguntas pertinentes”, donde participaron Trinidad Padilla, presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados y el especialista en temas educativos, Eduardo Andere y el autor de esta columna. Ante la presencia del gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza y la secretaria de Educación y Cultura, Guadalupe Chacón Monárrez, el panel reflexionó sobre la inversión del Estado en educación, el papel de los maestros como actores fundamentales del proceso educativo y la ruta que se debe seguir para elevar la calidad de la educación en el país, entre otros aspectos.
emilio.zebadua@hotmail.com