Reforma
17 de enero de 2011
Susana Moraga
Acusan desperdicio de gasto en ciencia
Advierte Academia Mexicana de Ciencias migración de cerebros y baja competitividad
Ciudad de México (17 enero 2011).- Los rezagos en investigación y desarrollo que registra México han provocado que se pierda la inversión para formar investigadores, así como un desplome de su competitividad.
El presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, Arturo Menchaca, señaló que el Gobierno federal ha aplicado una política de no emplear a más investigadores recién egresados ante el cuello de botella formado por la falta de plazas.
«Más de la mitad de los chicos, de los pocos que estamos preparando, no encuentran chamba en investigación en México. Nunca encuentran chamba porque hay como un cuello de botella; hay una clara política en mantener congelada la contratación de jóvenes a nivel gubernamental.
«Entre los grandes empleadores de México están el Gobierno, la industria y las universidades. Del año 2000 para acá, el único que crece es la industria, pero eso se ha hecho a costa de congelar la contratación de doctores por el lado del Gobierno y de las universidades», señaló.
REFORMA publicó ayer que, de acuerdo al Estado de la Ciencia 2010 de la UNESCO, México es uno de los países que menos recursos destina a la ciencia y tecnología: .4 por ciento del Producto Interno Bruto.
Lo que ha provocado, además de una escasa formación de investigadores, que 14 de cada 100 doctores en ciencias emigren a Estados Unidos o Europa debido a los bajos salarios.
Menchaca precisó que, aunque el sector público no es el único que debe asumir la contratación, la estrategia provoca que lo que se invierte en la formación de investigadores, al final de cuentas lo aprovechan otros paíse .
«No es una política razonable la de entrenar cada vez a más doctores para que todos se vayan fuera. Si cada chico le cuesta al País 2 millones de pesos que entrenamos a nivel de doctorado –y si se promedia lo que hay qu pagar a las universidades y por los proyectos–, al final estamos perdiendo mil 500 doctores y 3 mil millones de pesos al año al no contratar a estos chicos», lamentó.
Baja de patentes
Además, indicó, la falta de inversión en ciencia y tecnología ha significado además que México sea poco competente ante la baja solicitud de patentes.
El informe de la UNESCO, realizado cada cinco años, señala que, con cifras de 2007, del total de registros de patentes en el mundo, 389 correspondieron a México, frente a 7 mil 621 solicitudes de China y 780 de Brasil.
Incluso, México fue rebasado por Turquía, que alcanzó 729.
Menchaca señaló que la situación de México es trágica en esta materia.
El País, dijo, invierte más en regalías, asesorías y en el mantenimiento de equipos costosos, que lo que vende en productos hechos en México.
«No somos competitivos a nivel global. Casi al mismo tiempo de la transición a la democracia, tuvimos una transición hacia la apertura de mercados. Son cambios estructurales importantes que estamos manejando mal», consid ró.
Los rezagos son evidentes también en la poca producción científica del País.
En los últimos cinco años, México registró 8 mil 262 publicaciones científicas, lo que significó .8 por ciento de todas las publicaciones en el mundo.
La UNESCO señaló que en Latinoamerica el crecimiento fue de 4 a 5 por ciento en la producción, debido al crecimiento que tuvo Brasil, con 26 mil 482 publicaciones.
Atrasa Conacyt lucha antidiabetes
Siraam Cabrera Vázquez y un equipo de investigadores buscan optimizar los trasplantes de islotes pancreáticos en pacientes con diabetes.
Su objetivo es contribuir a regular la glucosa sanguínea y mejorar la calidad de vida a quienes padecen esta enfermedad, una de las principales causas de muerte en México.
Sin embargo, su proyecto también ha sido afectado por retrasos en la emisión de convocatorias para financiar y desarrollar ciencia básica.
Mientras esperaba que saliera la convocatoria para investigación básica SEP-Conacyt, Siraam trabajó con reactivos sobrantes de otras investigaciones.
«El año pasado fue de esperar y esperar. Si uno no cuenta con recursos económicos no puede trabajar como se debe. Se requieren reactivos, medicamentos, equipo para hacer experimentos. Todo esto se tienen que comprar con los apoyos que da Conacyt», señaló.
Doctor por el Instituto de Fisiología Celular, Siraam desarrolla el proyecto desde el Departamento de Medicina Experimental de la UNAM, ubicado en el Hospital General de México.
Actualmente realiza trasplantes en modelos de ratas diabéticas, con la perspectiva de aplicar los avances en personas afectadas por la enfermedad.
«El objetivo de la contribución es la regulación de los niveles de glucosa en sangre. La causa es la mala función de los islotes por muerte de las células que los forman o por mal funcionamiento de las mismas», explicó e investigador.
Expuso que el trasplante de islotes ya se realiza en varias partes del mundo, sin embargo, las intervenciones son vía sanguínea, lo que ha ocasionado que las células de éstos mueran por falta de oxígeno.
A través de nanotecnología y con el uso de biomateriales, Siraam busca establecer los islotes en el páncreas y formar una red vascular y una nerviosa a fin de que sobrevivan sin riesgos.
«Pero en México trabajar en desarrollar ciencia es muy difícil», lamentó el especialista.
Señaló que el País ha caído en un circulo vicioso en el que no avanza por la falta de tecnología propia, y ésta no se desarrolla por los rezagos existentes en ciencia básica.
«Necesitamos tener tecnología pero antes necesitamos desarrollar el conocimiento, y mientras no se desarrolle conocimiento con la ciencia básica no se puede desarrollar la tecnología», dijo.
Doctorado por el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN, Cabrera Vázquez advirtió que de seguir así, México continuará dependiendo de la tecnología en general de otros países.
«Vamos a ser unos vendedores como lo es ahora con China, País que nos manda toda su producción y aquí la vendemos. Somos vendedores de los productos chinos, no somos generadores de nuestros propios productos».