El Financiero
06 de abril de 2006
Rosalía Servín Magaña
Para Octavio Paredes, presidente de la Academia Mexicana de las Ciencias (AMC), en esta administración la ciencia «ni la entendieron» los responsables de la misma, toda vez que «les pasó de noche».
La tarea ahora está en los propios científicos, la sociedad y los candidatos a la presidencia, a quienes la AMC prepara un documento con propuestas para mejorar este rubro.
Así lo aseguró Paredes en una reunión con los medios, donde además de la problemática de la ciencia y la tecnología, habló sobre el término de su periodo al frente de la academia (programado para el 28 de abril, cuando tomará su lugar Juan Pedro Laclette, vicepresidente del organismo).
En esta administración, dijo, no lograron entender que la ciencia es la generación de conocimiento, estructurado con el resto de las acciones que ocurren en su entorno.
Dentro de los logros registrados en este periodo -pese a las adversidades-, el directivo subrayó la insistencia para que la ciencia estuviera presente en la agenda nacional, con lo que la sociedad comenzará a identificar la labor de los científicos.
«Desde que se hizo la ley (que estipula el apoyo a la ciencia y la tecnología) sabíamos que difícilmente se iba a cumplir si no había una movilización de los científicos, ya no es posible que te den dinero por tu linda cara o porque somos los inteligentes, debemos salir a buscar esa interacción con la sociedad y los líderes políticos.»
Por eso se buscará a los candidatos a la presidencia para entregarles un análisis del rubro y propuestas sobre la ciencia, «y comenzar con esa movilización», refirió el todavía presidente de la AMC.
Como parte de los temas que contendrá este documento se encuentran problemáticas como el descenso del conocimiento, la competitividad, la falta de espacios para los jóvenes, de consolidación de grupos científicos y de interacción de la ciencia mexicana con los principales problemas de esta sociedad: agua, energía, migración, narcotráfico, pobreza; las ciencias emergentes: nanotecnología, biotecnología, educación molecular, etcétera.
¡También escribimos algunas de las áreas de oportunidad que tiene nuestro país, señalamos la fuga de cerebros tanto interna como externa y de los jóvenes científicos que no encuentran empleo.!