Reforma
20 de febrero de 2006
Requiere más autonomía
Jóvenes investigadores de diversas instituciones en todo el país, entre ellos de San Luis Potosí, pidieron que se reestructure el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) para que sea más autónomo, establezca una política de estado transexenal e impulse el desarrollo científico de México, sobre todo para ayudar a resolver los problemas que aquejan a la nación.
Dicha solicitud se dio a conocer durante una reunión que sostuvieron en la Universidad de Guadalajara, donde los jóvenes propusieron también que el próximo gobierno federal se preocupe por promover la participación de los científicos en la solución de los principales problemas nacionales.
Atocha Aliseda, investigador de¡ Instituto de Investigaciones Filosóficas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indicó se debe impulsar la formación de científicos en áreas multidisciplinarias e interdisciplinarias de acuerdo a los problemas que se quieran resolver porque la formación tradicional por disciplinas quedó rebasada ante la problemática nacional.
En la reunión «Perspectivas científicas y tecnológicas en México», en la que participaron jóvenes de todo el país y que organizó la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) y la Universidad de Guadalajara, se discutió la necesidad de formar nuevas generaciones de científicos con planes de estudio integrales para vincular las ciencias naturales y exactas con las sociales y humanidades.
Rafael Loyola, de la Coordinación de Humanidades de la UNAM, dijo por su parte que se requiere un cambio de mentalidad, pero en esta administración no hubo interés por la ciencia al leer las conclusiones del encuentro.
Loyola agregó que uno de los requisitos indispensables en el ejercicio de la investigación está el aspecto de la ética y la autocrítica en todos los aspectos de la ciencia y la academia, como lo marcaron las recientes noticias en relación con el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados, del Instituto Politécnico Nacional.
Ante legisladores como Salvador Martínez Della Rocca y Enrique Jackson, los investigadores resaltaron la necesidad de comprometer a los políticos para cumplir la ley de ciencia que establece destinar a este sector el 1.0 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), y tomar decisiones con base en el conocimiento.
Durante su conferencia magistral, Ruy Pérez Tamayo, investigador de la Facultad de Medicina de la UNAM y miembro de la AMC, comentó que en el futuro los científicos mexicanos deberán vincularse más con la sociedad para poder crecer.
«Necesitaremos una participación más activa de la AMC y de la sociedad civil. Este sector ha ganado peso social y político, y tendrá todavía más porque la ciencia se ha desarrollado a pesar y en contra del gobierno en los últimos 50 años y continuará haciéndolo a pesar del abandono y las crisis económicas’.
Datos del investigador universitario señalan que en el año 2000 en México había 0.65 científicos por cada 10,000 habitantes, cifra menor a la de países de similar desarrollo como Cuba con cuatro; Chile con tres y Brasil con 5.8 investigadores.
En tanto, mientras el presupuesto al sector en 2000 en México era de 0.35 por ciento del PIB, Brasil dedicaba el 1.04 por ciento; España el 1.03 y China el 1.23 por ciento.