Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/217/11
México, D.F., 3 de noviembre de 2011
- Un comunicador debe de ser capaz de recrear el conocimiento de la ciencia y la tecnología para que sea accesible a su público
- México ha sido pionero en divulgación de la ciencia en nuestra región Latinoamericana
- La Dra. Julia Tagüeña, presidenta de la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.
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La importancia de divulgar la ciencia y comunicar los procesos de la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la innovación a diversos públicos, es vital para elevar la calidad de vida de las sociedades contemporáneas, contribuir a la apropiación del conocimiento científico, consolidar una cultura científica en la sociedad y democratizar el conocimiento, aseguró en entrevista la Dra. Julia Tagüeña, presidenta de la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.
Academia Mexicana de Ciencias (AMC): ¿Divulgación o comunicación de la ciencia?
Dra. Julia Tagüeña (JT): En México solemos usar divulgación y comunicación de la ciencia como términos equivalentes y en muchos casos lo son. Sin embargo, hay diferencias entre las dos definiciones. Divulgación de la ciencia es hacer llegar la ciencia a un público no especializado.
El término comunicación es más amplio, incluye otras actividades como son la popularización, la difusión entre pares y el periodismo científico. También es el término utilizado cuando se habla de la disciplina «comunicación de la ciencia» («science communication» en inglés).
Finalmente, y eso es muy importante, hablar de comunicación es considerar las dos vías, la de ida y la de vuelta. Para que haya comunicación con el público, la opinión de éste debería de ser considerada por el comunicador. Sería muy bueno construir un glosario Iberoamericano sobre estos temas porque hay mucha diversidad de expresiones relacionadas con la comunicación de la ciencia en nuestra región.
AMC: ¿Existe un diagnóstico de los espacios que ocupan los temas de ciencia en los medios?
JT: Existen algunos diagnósticos. Con el apoyo de la red de Complejidad, Ciencia y Sociedad financiada por CONACyT estamos realizando un diagnóstico. Estamos muy cercanos a publicar. Hemos empezado con el diagnóstico del Distrito Federal con una metodología basada en un sistema de filtros, cuestionarios adecuados, que pensamos podrá ser aplicada al resto del país.
AMC: ¿Cuál es la importancia de que exista un estudio al respecto para la implementación de políticas?
JT: Antes de definir una política de desarrollo tienes que saber con lo que cuentas. Se trata no sólo de hacer planes cualitativos sino cuantitativos y poner muy claras las metas a corto, mediano y largo alcance. En México hay muchas actividades de divulgación de la ciencia de calidad, pero muchas no se conocen más que en el entorno local. Es importante organizar toda esta información.
AMC: ¿En qué consiste la propuesta que están propugnando desde la Somedicyt -la política nacional- que nos llevará a ser un país más culto científicamente hablando?
La propuesta está resumida en la Declaración de Morelia que fue la conclusión del Congreso XVIII de SOMEDICyT realizado el mes de septiembre pasado en esta ciudad (http://bit.ly/v8tBuc). En esta declaración se desglosan los puntos fundamentales que deben de ser considerados para una política nacional de comunicación de la ciencia y se hace un llamado a todos los niveles de gobierno, los legisladores, los consejos de ciencia y tecnología, las instituciones de educación superior, los centros de investigación, las academias y asociaciones, pero sobre todo a la sociedad en su conjunto a que participen en políticas públicas que fomenten la cultura científica.
AMC: ¿Frente a otros países de Latinoamérica, cómo está México en el tema de divulgación-comunicación de la ciencia?
JT: México ha sido pionero en divulgación de la ciencia en nuestra región Latinoamericana. Existen varias redes latinoamericanas de comunicación de la ciencia donde México participa y ha sido líder en diversas ocasiones. Es muy importante no perder esa participación destacada porque ésta es una área del conocimiento donde tener un idioma común nos fortalece. Aunque habría que decir que el lenguaje común es el «portuñol» porque tenemos una relación muy estrecha con Brasil, como si habláramos el mismo idioma. Por ejemplo, en el congreso de SOMEDICyT que ya mencionamos, contamos con la presencia de varios participantes latinoamericanos, de Costa Rica, Uruguay, Colombia y Brasil.
AMC: ¿Cuáles son los retos en los medios de comunicación y en los que emiten el mensaje?
JT: En los comunicadores de la ciencia el gran reto es crear el lenguaje para divulgar la ciencia. Un lenguaje que es más que una traducción del lenguaje técnico, aunque traducir bien también es complicado. Un comunicador debe de ser capaz de recrear el conocimiento de la ciencia y la tecnología para que sea accesible a su público. Esta es una labor especializada que requiere de entrenamiento y de formación tanto en ciencias naturales como en sociales.
El reto con los medios de comunicación es convencerlos de la importancia de la comunicación de la ciencia y la técnica para que le dediquen un espacio amplio y digno. Es común que los periodistas científicos tengan dificultades para meter noticias de ciencia y tecnología y que éstas se consideren un poco de relleno, en lugar de fundamentales para nuestro futuro.