El Porvenir
19 de mayo de 2011
Notimex
Cabo Cañaveral, Florida.- El transbordador Endeavour arribó a la Estación Espacial Internacional (EEI) para entregar un detector magnético, cuyo costo fue de dos mil millones de dólares, que los científicos esperan comience a revelar los misterios del universo.
Las tripulaciones de ambas naves tendrán la tarea de adaptar el jueves el Espectómetro Magnético Alpha-2 (AMS-2) a la EEI.
El AMS-2 es un experimento en su mayor parte de la Administración Nacional para la Aeronáutica y el Espacio (NASA) y la Agencia Espacial Europea en el que participan 60 agencias de investigación de 16 países.
El Espectómetro contiene trabajo, materiales e instrumentos aportados con apoyo del Conacyt, por primera vez con científicos mexicanos del Instituto de Física de la Universidad Nacional Autónoma de México (IFUNAM) y de la Academia Mexicana de Ciencias.
Ambas instituciones encabezadas por el físico nuclear Arturo Menchaca Rocha. El Endeavour que realiza su viaje final y el penúltimo de la era de transbordadores de la NASA fue anclado a la EEI a las 06:41 horas local, mientras las dos naves volaban a unos 321 kilómetros de distancia de la Tierra sobre Chile.
El comandante Mark Kelly, esposo de la congresista de Arizona Gabrielle Giffords, quien fue víctima de un atentado en enero pasado y que el lunes asistió al lanzamiento del transbordador, fue el encargado de maniobrar el Endeavour hasta engancharlo a la estación.
Una vez abiertas las escotillas de ambas naves, Kelly fue el primero en entrar a la estación orbital y fue recibido con abrazos por sus seis residentes.
En total son 12 astronautas de manera conjunta. Siete estadounidenses, tres rusos y dos italianos.
Este es el vuelo número 12 y final del Endeavour a la estación espacial, ya que al completar su misión de 16 días, a su regreso a la Tierra será retirado para ser expuesto en el Centro de Ciencia de California.
El transbordador Atlantis será el encargado de la última misión de un transbordador de la NASA a la estación espacial en julio próximo.
Kelly y la tripulación de cinco astronautas pasarán casi dos semanas en la estación. Su tarea primordial será instalar el Espectómetro Magnético Alpha-2, un proyecto liderado por el físico Premio Nobel, Samuel Ting, del Instituto Tecnológico de Massachusetts.
El AMS-2, es un detector de partículas que medirá los rayos cósmicos y buscará distintos tipos de materia inusual, como la materia oscura y la antimateria, datos que ayudarán a estudiar la formación del universo.
El aparato que pesa alrededor de siete toneladas operará como un módulo externo a la estación por tiempo indefinido y generará datos constantemente en línea que podrán ser analizados en la Tierra.
Una vez instalado el Espectómetro los científicos prevén recibir datos tan pronto como en una o dos horas. El AMS-2 operará por la próxima década que se prevé tenga de vida el complejo orbital.