Uno más uno
19 de noviembre de 2009
Editorial
Es plausible el intento del presidente Felipe Calderón de apostar por la ciencia y tecnología, porque ello implica apostar por el progreso de la nación. Sin embargo, reconoce que los esfuerzos en la materia han sido lentos.
Mientras países como Brasil le apuestan a iniciar un proceso de inversión en la generación de sus “cerebros” por estar a la altura de los países asiáticos y Estados Unidos, en México parece una materia olvidada.
Hoy tenemos en el país 14 mil 559 miembros registrados en el Sistema Nacional de Investigadores (SIN), pero por lo menos debería tener 70 mil científicos dedicados la mayoría a hacer investigación básica en áreas primordiales como petróleo, física, nanotecnología, robótica, genómica y otras formas alternas de energía, así como bioquímica.
La Academia Mexicana de Ciencias recomienda poner atención en la llamada investigación básica, que es la producción original del conocimiento, pero el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) no la apoya por consideraría costosa y de largo plazo, y más bien privilegian la investigación aplicada, es decir, los descubrimientos hechos en otros países cómo pueden ser utilizados en el nuestro”.
Además de los 14 mil 559 miembros del SNI en el país muchos de ellos no están en labores de investigación sino que pueden sólo ocupar cargos administrativos o cargos burocráticos, por lo que la cantidad de científicos disminuye de manera considerable y, por otra parte, algunos investigadores están obteniendo doctorados express en instituciones de poca calidad o doctorados a distancia sobre todo los que ofrecen en universidades españolas.
En México se destina un presupuesto muy bajo a la ciencia, sólo .37 por ciento del Producto Interno Bruto, pero de esa cantidad 90 por ciento es invertida en investigación aplicada y no básica».
Todo esto lo debe tener en cuenta el Jefe del Ejecutivo, quien afirma que a pesar del rezago, hay avances en la generación de investigadores, pues el Sistema Nacional de Investigación registra hoy en día 15 mil 500 científicos y tecnólogos, 15 por ciento más que en 2006″.
Además, señala contamos con más científicos y más investigadores muy destacados en ciencias genómicas y astrofísica, y el gobierno invierte fuertemente en la educación tecnológica de ingenieros directamente asociados a la industria aeroespacial, a la industria electrónica o a la industria automotriz, para que se vinculen de inmediato al sector productivo y actualmente el Congreso analiza la creación de la agencia aeroespacial.
Cabe recordar y esto lo sabe muy bien Felipe Calderón, que los países que invierten en investigación se vuelven más competitivos y mejoran las condiciones de vida de su población. Mientras más se invierta en investigación, desarrollo e innovación en un país, más crecerá su economía.