Nueva Orleans, indefensa

Cambio de Michoacán
04 de julio de 2006
Redacción

Para Emir Macari, investigador de la Universidad Estatal de California en Sacramento y nuevo miembro correspondiente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), estas fallas son la muestra clara de la responsabilidad del gobierno federal estadounidense ante la catástrofe sufrida por los habitantes, principalmente pobres y negros.

El experto en ingenierí­a geotécnica recordó que el gobierno de George W. Bush quiso en un primer momento ocultar su responsabilidad aduciendo que las olas generadas por el huracán habí­an desbordado los diques que protegen la ciudad, sin embargo, se ha demostrado que la inundación fue ocasionada por el mal diseño y la falta de mantenimiento de los diques.

«Se recortó el presupuesto para el mantenimiento pues el dinero se destinó a la compra de bombas usadas en Iraq», afirmó. «Pero el cuerpo de ingenieros aceptó su responsabilidad por primera vez luego de los resultados del análisis tecnológico y cientí­fico».

Durante la conferencia que brindó en las instalaciones del Instituto de Ingenierí­a de la UNAM, Macari afirmó que los daños ocasionados en la ciudad sureña cuna del jazz ascienden a más de 20 mil millones de dólares, suma que no quieren asumir ni gobierno federal ni las compañí­as aseguradoras.

Pero ahora, en el informe Performance evaluation of the New Orleans and southeast Louisiana hurriacane protection system, presentado hace apenas unos dí­as, se reconoce la responsabilidad del gobierno ya que las inundaciones sufridas por la ciudad se debieron a las fallas técnicas en la construcción de los diques de los canales que atraviesan Nueva Orleans.

Por ello, Macari, también miembro correspondiente de la Academia de Ingenierí­a, resaltó la importancia de que los ingenieros consideren el impacto de sus obras en la sociedad. «Debemos pensar en la gente».

Asimismo, el decano y profesor de ingenierí­a y fí­sica de la Escuela de Ciencias, Matemáticas y Tecnologí­a, en la Universidad de Texas en Brownsville destacó el impacto de los ingenieros geotécnicos en diversas obras como los diques, pues son los responsables de analizar el suelo y subsuelo, donde se construyen.

«Lo que está debajo es el principal problema geotécnico», dijo Macari, quien, entre otros, ha recibido los premios Presidential Faculty Fellow White House, Aldo Leopold Leadership in Ecology Fellow y el LSU-Highest Academic Achievement Award, Louisiana Congressional Legislators.

La ciudad de Nueva Orleans se encuentra por debajo del nivel del mar, del Rí­o Missisippi y del Lago Pontchartrain, pero los diques que fallaron no fueron los que rodean el cauce del rí­o ni del lago, sino de los canales que atraviesan la ciudad y que fueron construidos en el siglo XIX.

La mayorí­a de estos diques fue construida con materiales porosos e inadecuados como troncos del siglo XIX; de igual manera, el mal diseño ingenieril y la inestabilidad de las bardas construidas sobre los mismos diques, junto con la urbanización excesiva de la ciudad, los daños ecológicos de las costas y el calentamiento global, ocasionaron el desastre.

Macari realizó un recuento de las recomendaciones realizadas por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos: restaurar los manglares y las islas de sedimentos en las costas; mover los diques al sur de Nueva Orleans; mejorar el sistema de bombeo; eliminar los canales que atraviesan la ciudad; y realizar diques más resistentes.

Sin embargo, ninguna de las recomendaciones han sido realizadas en su totalidad; los diques no han sido totalmente reparados y la ciudad se encuentra indefensa ante el ataque de otro huracán como Katrina de categorí­a 4, o incluso de menos intensidad.

Macari hizo hincapié en la necesidad de incrementar el número de ingenieros y cientí­ficos, ya que la sociedad no puede crecer sin ellos. «Necesitamos más gente, pues los interesados en la ingenierí­a van disminuyendo, por lo que tenemos que entusiasmar y mostrar a las nuevas generaciones que estas cosas son interesantes», concluyó.

Tomado de la Agencia de Noticias de la Academia Mexicana de Ciencias, con autorización de los editores.

www.amc.unam.mx

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


Notice: ob_end_flush(): failed to send buffer of zlib output compression (0) in /home/amcedu29/public_html/comunicacion/wordpress2019/wp-includes/functions.php on line 5373