Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/246/11
México, D.F., 8 de diciembre de 2011

• Ha resultado ser exitosa en mamíferos pequeños
• Debemos facilitar los caminos para que la sociedad pueda entender los alcances que tiene la ciencia básica de buena calidad en la solución de los muchos problemas del país: Jaime Mas Oliva

Jaime Mas Oliva, investigador del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM y miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.
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La detección y cuantificación de la Proteína Transferidora de Esteres de Colesterol (CETP) en plasma humano podrá ser un factor de importancia para el médico al momento de definir tratamientos personalizados en quienes tienen probabilidades de desarrollar aterosclerosis, sostuvo Jaime Mas Oliva, investigador del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM.

El científico, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias, dijo que junto con su grupo de trabajo estudiando esta misma proteína, ha podido desarrollar una exitosa vacuna de tipo terapéutico de aplicación nasal actualmente probada exitosamente en mamíferos pequeños y que será durante el próximo año cuando se realicen los trámites necesarios para poder ser analizada en el humano.

“Este nuevo desarrollo tecnológico fundamentado en nuestro trabajo de ciencia básica, será enviado en fecha próxima al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial para su potencial patentamiento”, dijo y explicó que la parte más novedosa del proyecto ha sido la de poder transferir conceptos básicos originales de nuestro laboratorio a un sencillo desarrollo tecnológico fundamentado en un pequeño péptido parte de la proteína CETP.

La ateroesclerosis es una enfermedad que se caracteriza por el endurecimiento de las arterias debido a la acumulación de colesterol y el desarrollo de procesos inflamatorios en sus paredes, lo que impide el flujo de la sangre y puede a su vez generar otros padecimientos.

Por otro lado, el experto en el estudio de la membrana celular expresó en relación a los resultados de estas investigaciones que “el trabajo realizado en nuestros laboratorios no debe visualizarse como un lujo, sino mas bien como una inversión a futuro. Si deseamos salir de la absoluta dependencia del exterior en la que vivimos, la única solución es la de empezar a creer en nosotros mismos y empezar a poner en práctica la creatividad que nos caracteriza como pueblo”.

Mas Oliva comentó que esta conjunción entre el desarrollo del conocimiento y su aplicatividad en respuesta a alguna problemática, por ejemplo de salud, es aún muy limitada en México. “En contraste, los países que nos superan en desarrollo han sabido conjuntar de maravilla esta dualidad en beneficio de sus sociedades y solo de forma secundaria a las nuestras, llegando a ser esto, en mí opinión, un potencial problema de seguridad nacional”.

Expuso que mientras en Europa y Estados Unidos no se tiene que convencer a nadie de que el desarrollo en ciencia y tecnología es en todos sentidos benéfico para un país; en México aún estamos en el proceso de convencer a mucha gente, especialmente a nuestros legisladores.

El ganador del Premio Ciudad Capital, Heberto Castillo 2011 en la categoría de Innovación dijo a propósito de este nuevo reconocimiento en su carrera, que los “premios son principalmente una oportunidad de realizar la tan necesaria divulgación de los hallazgos realizados en nuestros laboratorios. Esto último pensando en la necesidad de que la sociedad en general entienda los alcances que puede tener el realizar ciencia básica de buena calidad en la solución de los muchos problemas del país”.

Y en ese sentido, el investigador distinguido con la beca de la Fundación John Simon Guggenheim, el Premio de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias, y ganador del premio “Manuel Noriega” por la Organización de Estados Americanos (OEA), entre otros reconocimientos, sostuvo que al ser científico y trabajar en México, la única manera de no ser afectado por la situación social y económica que nos rodea y de continuar avanzado con lo que se tiene, es la de fijar menos la vista en la tierra y voltear más hacia las estrellas. “Del esfuerzo y el trabajo de calidad siempre saldrán cosas muy buenas.”