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Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/089/09
México, D. F., 27 de junio de 2009.

• La Academia Mexicana de Ciencias presentó el libro Agenda del Agua, un trabajo de Blanca Jiménez, Luis Aboites, Enrique Cifuentes y María Luisa Torregrosa
• Los autores destacan en el libro la importancia de incluir el tema del agua en la agenda política, más allá de los discursos

La AMC presentó el libro La Agenda del Agua, en el que investigadores de diversas disciplinas analizan la problemática del líquido en México.
Foto: AMC
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Tras lamentar el muy precario lugar que tiene el tema del agua en México en los últimos años, Luis Aboites Aguilar, investigador miembro de la Red del Agua de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), señaló que en los últimos 50 años el agua dejó de ser una de las grandes prioridades del país convirtiéndose en un asunto marginal, por lo menos en términos presupuestales.

Al participar en la presentación del libro Agenda del Agua, elaborado por la Red del Agua de la AMC, del cual es coautor, dijo que si se compara el presupuesto de la Comisión Nacional del Agua en estos años con el presupuesto que tenía la extinta Secretaría de Recursos Hidráulicos, “la diferencia es desoladora”.

Ante este panorama, el historiador del Colegio de México e integrante de la AMC hizo un llamado a que “juntos encontremos la forma de hacer nuevamente del agua una prioridad para el país”.

En la presentación, la coordinadora de la Red del Agua de la AMC e investigadora del Instituto de Ingeniería de la UNAM, Blanca Jiménez Cisneros, advirtió que “no podemos dejar pasar más tiempo sin hacer una Agenda Nacional del Agua, en la que participen los académicos, el gobierno y las organizaciones ciudadanas”.

La especialista, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias, dijo que una de las actividades de la Red del Agua, conformada por 77 científicos de todo el país, es la edición del libro Agenda del Agua.

Sobre el origen del documento, señaló que se basa en la profunda convicción que tiene la AMC de que en México hay un problema muy grave en torno al agua y que es necesario avanzar más rápido para resolverlo.

Al respecto, señaló que los autores del libro están convencidos de que la forma de avanzar más rápido en la solución del problema del agua consiste en involucrar a la sociedad en su conjunto.

El propósito del libro, dijo la experta en calidad del agua, es identificar los temas prioritarios en torno al problema del líquido, y utilizando las cifras oficiales, ayudar a las dependencias gubernamentales a analizar sus resultados y a hacer propuestas concretas para que ellos las retomen.

Por otro lado, María Luisa Torregrosa, especialista de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO- México) coincidió con Blanca Jiménez y Luis Aboites en que para construir la Agenda del Agua que necesita México, es necesario un diálogo abierto.

Al dirigirse a sus colegas, la coautora del libro destacó la importancia de dar el siguiente paso para definir líneas de investigación concretas e instalarlas en la Red del Agua de la AMC.

Por su parte, Hilda Salazar, titular de la asociación civil Mujer y Medio Ambiente, dijo que el tema del agua se ha politizado y, como consecuencia, se discute mucho en torno al mismo, pero de manera coyuntural y con poca profundidad, por lo que celebró la iniciativa de la AMC para discutir sobre el agua, integralmente, con profundidad y con una visión global.

Frente a los enfoques tecnicista y financierista del agua, ambos insuficientes y limitados, Hilda Salazar consideró que se debe tomar el problema en sus justos términos, desde el punto de vista de la desigualdad social, ya que la cobertura de agua no siempre está relacionado con su disponibilidad natural.

Al respecto, la economista propuso a los miembros de la Red del Agua trabajar en el diseño de un indicador compuesto de agua, que sirva también como indicador de desarrollo humano y de calidad de vida.

Por su parte, Raúl Rodríguez, quien habló a nombre del Consejo Consultivo del Agua, consideró que el libro editado por la AMC, constituye una llamada de atención para todos: gobierno, academia y ciudadanos, para reflexionar sobre la situación del país en términos de la cantidad y la calidad del agua.

El documento analiza y señala debilidades del sistema de administración gubernamental del agua, expresó, sin embargo; no sólo propone y aporta caminos claros, sino que además la Red del Agua se ofrece a llevar a cabo e instrumentar las propuestas.

El funcionario propuso incluir el tema de la educación en la Agenda del Agua, y propuso la creación de un programa dirigido a niños y jóvenes para generar una nueva cultura del agua.

Al exponer su comentario en torno a la obra, Antonio Capella, investigador del Instituto de Ingeniería de la UNAM, opinó que un problema central que debería de incluirse en la Agenda es el mal estado de la infraestructura de distribución de agua en la ciudad, causante de la fuga de alrededor del 50 por ciento del agua que se introduce en la red.

Asimismo, el especialista en agua llamó la atención sobre el hecho de que en las zonas rurales, donde se encuentran los más pobres, el costo por persona para que tenga servicios es mayor que en una zona urbana, por lo que, dijo, se debería de estar dispuesto a subsidiarlos en un mínimo gesto de solidaridad.

El libro Agenda del Agua fue redactado en conjunto por cuatro investigadores de diversas disciplinas: Luis Aboites Aguilar, investigador de El Colegio de México; Enrique Cifuentes, investigador del Instituto Nacional del Salud Pública; María Luisa Torregrosa, especialista de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, y Blanca Jiménez Cisneros, investigadora del Instituto de Ingeniería de la UNAM, miembros y coordinadora de la Red del Agua de la AMC, respectivamente.