Academia Mexicana de Ciencias
Boletí­n AMC/26/07
México, D.F., miércoles 30 de mayo de 2007

• Vincular el comercio exterior mexicano con la economí­a nacional ha sido un problema que no ha perdido vigencia en México: Isabel Avella Alaminos
• La galardonada con el Premio de la Academia a la Mejor Tesis en Humanidades 2006 señala a la inversión en educación y ciencia como necesarias para insertar al paí­s a la economí­a global de forma competitiva

Isabel Avella Alaminos, galardonada con el Premio de la Academia a la Mejor Tesis en Humanidades 2006.
Foto: Archivo

Ante la globalización y el libre comercio, nuestro paí­s necesita mirar hacia adentro y a su historia pues la simple importación de modelos o la firma de tratados comerciales no resolverán las carencias, inequidades y obsolescencias de la economí­a interna, señaló Isabel Avella Alaminos, ganadora del Premio de la Academia a la Mejor Tesis de Doctorado en Humanidades 2006.

Por ello, agregó la investigadora, México debe encontrar la mejor forma de insertarse en el marco de la economí­a global, invirtiendo en las áreas que están definiendo los criterios de competitividad mundiales, como la educación, la ciencia y la tecnologí­a pues, de no tomarse en cuenta, la nación corre el riesgo de quedarse, una vez más, en la antesala del desarrollo.

Este galardón otorgado por la Academia Mexicana de Ciencias reconoce el trabajo doctoral de jóvenes investigadores menores de 40 años que realizaron sus estudios de posgrado en instituciones mexicanas.

Avella Alaminos, doctorada por El Colegio de México, indicó que el panorama actual tiene similitudes con la evolución del comercio exterior que se dio durante el Porfiriato y la época posrevolucionaria. En ese periodo, la idea de financiar la sustitución de importaciones a través de las exportaciones perdió í­mpetu, por la contraposición de los objetivos de la polí­tica financiera del gobierno mexicano con las necesidades de financiamiento del comercio exterior; pero los problemas productivos del paí­s le imposibilitaron incrementar las exportaciones dentro de la dinámica extraordinaria que estableció la II Guerra Mundial.

“Vincular el comercio exterior mexicano con la economí­a nacional ha sido un problema que no ha perdido vigencia en México!, explicó la investigadora. ¡El paí­s encara una disyuntiva: adaptarse a una serie de condiciones exteriores que no puede modificar y que están marcando la pauta a seguir en materia de comercio internacional”.

La tesis de Isabel Avella Alaminos, intitulada De oportunidades y retos. Los engranajes del comercio exterior de México (1920-1950), analiza la transformación que tuvo lugar en el modelo del comercio exterior mexicano al pasar de una estructura comercial cimentada en las exportaciones al modelo de sustitución de importaciones.

En el Estado posrevolucionario, aunque el comercio exterior mexicano tuvo un desarrollo menos dinámico comparado con otras etapas, éste continuó como una actividad relevante; de ahí­ que se preocupara por instrumentar una polí­tica especí­fica para regular esta actividad, sin embargo, a la larga, los intentos por configurar una nueva estructura de comercio exterior tuvieron un alcance limitado, que se tradujo en la aparición de un modelo trunco de sustitución de importaciones.

“Examiné el tema desde la óptica de la historia económica cualitativa, y tomé en cuenta el doble contexto en el que se dio el proceso, por un lado, la reconfiguración de la economí­a nacional tras el fin de la Revolución Mexicana hacia 1920 y, por otra parte, el desmoronamiento del orden internacional que habí­a prevalecido desde el último cuarto del siglo XIX, que fue acompañado por fenómenos financieros contraproducentes para el desarrollo del comercio mundial”, explicó.

Este perí­odo de la historia del comercio exterior mexicano habí­a pasado casi inadvertido o se habí­a abordado de manera fragmentada, por ello, Avella Alaminos mencionó que el Premio que recibió por parte de la AMC ¡es significativo por el hecho de que se haya reconocido un trabajo de historia económica!.

Asimismo, la investigadora aprovecho para mencionar que la evaluación en las humanidades debe ser distinta a las disciplinas exactas o naturales. “Hace falta que las autoridades y, sobre todo, la clase polí­tica tomen conciencia de estas diferencias, además de que es necesario que se conciba a las humanidades como parte sustancial del desarrollo integral del paí­s”.

Señaló que es importante impulsar estos galardones porque así­ se da a conocer nuestro trabajo en un cí­rculo más amplio, ya que el premio puede facilitar la publicación de nuestras tesis para que éstas lleguen a más lectores. ¡También son un aliciente para continuar en el camino de la investigación, a pesar de las trabas institucionales que muchas veces enfrentamos para lograrlo”, concluyó.

Contacto:
Isabel Avella Alaminos
iavella@hotmail.com