Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/207/19
Ciudad de México, 08 de noviembre de 2019

• El primer taller de este tipo se realizó en la Zona Rosa, Ciudad de México. La actividad consistió en un armado mecánico realizado con distintos componentes.

La Academia Mexicana de Ciencias y la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación unieron esfuerzos y realizaron el primer taller de Robótica Inicial en PILARES de Zona Rosa. Foto: Elizabeth Ruiz/AMC

La Academia Mexicana de Ciencias (AMC) y la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) unieron esfuerzos y realizaron el primer taller de Robótica Inicial en el Punto de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (PILARES), Zona Rosa, con la finalidad de fomentar la generación, uso y aprovechamiento de la ciencia, la tecnología y la innovación en la población.

El taller, que es parte del Programa de Computación para Niños y Jóvenes de la AMC y que dirige el doctor Enrique Ruiz-Velasco, tiene como objetivo iniciar a los niños y jóvenes en el estudio de las ciencias, en particular de física y matemáticas, a través de la enseñanza de elementos básicos de robótica y electrónica.

Los participantes de esta primera actividad obtuvieron conocimientos básicos de robótica, armaron engranes, ocuparon un motor, utilizaron pequeñas sillas de plástico e hilos para armar un dispositivo, y gracias a una pila dieron potencia a su motor e hicieron volar las cuatro sillas de colores. “En realidad, y desde el punto de vista técnico, lo que armaron fue una mesa eléctrica de engranes, un mecanismo básico de un robot”, comentó el coordinador del Programa.

Los participantes de esta primera actividad obtuvieron conocimientos básicos de robótica, armaron engranes, ocuparon un motor, utilizaron pequeñas sillas de plástico e hilos para armar un dispositivo. Foto: Elizabeth Ruiz/AMC

El desafío final fue controlar el movimiento de este mecanismo utilizando un teléfono celular. Foto: Elizabeth Ruiz/AMC

La primera parte del taller consistió en la explicación de la importancia de la robótica y su relación con la ciencia y la tecnología. De manera lúdica los niños y jóvenes crearon, organizaron, ejecutaron y controlaron los mecanismos que armaron.

El material con el que trabajaron constó de una base para el montaje, engranes, sillas de plástico, hilo, un motor de juguete y una pila. Al finalizar el taller, los niños y jóvenes se pudieron llevar a casa conocimiento básico sobre robótica y también el mecanismo que construyeron.

Y aunque para el armado mecánico que realizaron los participantes se utilizó una mesa reductora de engranes, con un arreglo de sillas voladoras, el desafío final fue controlar el movimiento de este mecanismo utilizando un teléfono celular.

Cabe señalar que esta actividad cuenta con una programación de otras 19 fechas en distintos PILARES y en diferentes horarios antes de que concluya el año 2019.

Elizabeth Ruiz Jaimes