Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/183/18
Ciudad de México, 10 de agosto de 2018

• A través de este sistema las personas pueden identificar problemas en su entorno que les afectan directamente, registrarlas a través de fotos y videos, y proponer soluciones.
• Académicos discutieron este y otros proyectos de investigación que buscan el bienestar de la sociedad en el Primer Foro de Ciencia, Tecnología e Innovación 2018.

El investigador Salvador Ruíz Correa, del Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (Ipicyt), en un trabajo de campo con un grupo de jóvenes para el uso de la plataforma UrBis.
Foto: tomada de http://urbis.cns-ipicyt.mx/You-i.Lab.
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El Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos predice que para el año 2050 el 85% de la población estará en centros urbanos, y ante las problemáticas que ya registran varias ciudades en México, se tendría que pensar en qué se va a hacer, planteó con apremio el investigador Salvador Ruíz Correa, del Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (Ipicyt).

Como una forma de atender algunas de las problemáticas socio-urbanas, el especialista en ciencias de la computación ha trabajado junto con un grupo de investigadores del Ipicyt, el Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial, el Centro de Investigación y Docencia Económicas y de la Escuela Politécnica Federal de Lausana, en Suiza, en la plataforma UrBis, la cual permite utilizar el teléfono móvil para documentar, por ejemplo, el ambiente urbano o saber cuántas pandillas hay en una ciudad.

Acerca de las preguntas en las que se basó este proyecto, el doctor Ruíz Correa dijo que fueron las siguientes: ¿cómo podemos usar la tecnología para empoderar a los ciudadanos y que reflexionen acerca de los problemas urbanos?, ¿cómo a través de su propia participación los ciudadanos pueden generar propuestas? y ¿cómo crear sinergias con el gobierno para impulsar estas propuestas?

La idea detrás de UrBis es que sean las personas las que identifiquen las problemáticas socio-urbanas que les afectan directamente y propongan soluciones que puedan llegar a los tomadores de decisión y de esta manera generar políticas públicas, para que luego los ciudadanos y el gobierno actúen de manera conjunta.

Al dar más detalles de la plataforma, con la que los ciudadanos pueden salir y documentar los problemas que consideran de interés, Ruiz Correa destacó que es de libre acceso, ya que tiene una licencia gratuita siempre y cuando no se tengan fines comerciales. Además, una de las ventajas de este sistema es que se puede utilizar en diferentes ciudades y en distintos contextos urbanos.

“Hemos trabajado en ocho ciudades de la república, entre ellas Guanajuato, Mérida y Querétaro, en donde abordamos temas diversos para los ciudadanos, desde mapear todos los baches que hay en Torreón, por ejemplo, hasta tocar el tópico de las pandillas en León”.

Para el tema de las pandillas, explicó Ruíz Correa, contactaron a un grupo de especialistas para que platicaran con los jóvenes de 40 bandas de la ciudad de León, a quienes les proporcionaron la tecnología con el fin de que registraran (con fotografías, audios, videos, encuestas) cómo es el lugar donde viven, determinar en qué lugares de la ciudad están, cuáles son sus intereses. Entre los resultados obtenidos está que la situación de las pandillas no es un problema de seguridad pública sino de marginación social.

Un espacio de discusión
El proyecto “Plataforma móvil georreferenciada para el estudio interdisciplinario de problemas socio-urbanos en México”, fue uno de los tres que se presentaron durante las sesiones de Dolphin Tank del Primer Foro Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación 2018, con el fin de discutir con otros académicos acerca del impacto que su estudio podría tener en el bienestar de la sociedad.

En total, en este panel de presentaciones se dieron a conocer tres proyectos de atención a problemas nacionales bajo el tema de movilidad y seguridad ciudadana, los cuales formaron parte de la convocatoria del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología para la Atención a Problemas Nacionales.

En cuanto a los encargados de cuestionar a los responsables técnicos de los proyectos fueron: Guillermo Larios Hernández, de la Universidad Anáhuac; Fernando Lozano Ascencio, del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la UNAM; Olivia Joanna Gall, del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM; Rubén Oliver Espinoza, del Centro de investigaciones Económicas, Administrativas y Sociales del IPN; Gastón Cedillo, responsable técnico del Laboratorio Nacional de Sistemas de Transporte y Logística con sede principal en el Instituto Mexicano del Transporte; mientras que Alberto Hernández, director del Colegio de la Frontera Norte, fue el moderador de la sesión.

Entre los comentarios que surgieron en este espacio de discusión académica hubo uno que destacó como relevante de la plataforma UrBis, y es que incentiva a las personas a través de retos urbanos, a documentar diferentes problemáticas del lugar en donde viven, con lo que la gente se apropia de los datos, los analiza y reflexiona, y propone soluciones. Aunque los objetivos en lo que se basa la plataforma son flexibilizar la relación con los tomadores de decisiones, esto no ha sido sencillo, ya que se requiere de voluntad política.

Al respecto de este tema, hubo discrepancia entre si la plataforma tiene que apostar por impulsar las soluciones desde abajo; es decir, que los usuarios se autoorganicen e impulsen hasta el final la resolución de las problemáticas, o que se encuentre un punto medio y que el gobierno tenga una participación concreta en la resolución de las problemáticas que identifican los ciudadanos al usar la plataforma.

Otro aspecto que se resaltó en el ejercicio de discusión académica fue que esta opción digital tiene potencial para ser utilizada después de un temblor, pues permitiría poder georreferenciar la situación de los edificios dañados o de hacia dónde se mueven las personas después de un desastre.

Noemí Rodríguez González.