Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/114/14
México, D.F., 02 de abril de 2014

• El medio ambiente, un asunto del siglo XXI que nos hace preguntarnos cómo hemos sido capaces de alterar las cosas que la naturaleza ha desarrollado: José Narro Robles
• En 2006 arrancó el Programa de Laboratorios Nacionales del Conacyt, para apoyar el equipamiento de infraestructura especializada a las instituciones de ciencia, tecnología e innovación, explicó Enrique Cabrero

El edificio es un modelo de construcción sustentable en México y formaliza una nueva forma de vinculación entre el quehacer científico y la gestión pública, explicó César Domínguez Pérez Tejeda, director del Instituto de Ecología de la UNAM y miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.
Foto: Elizabeth Ruiz Jaimes/AMC.
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El Laboratorio Nacional de Ciencias de Sostenibilidad (Lancis) del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México, es un consorcio de vanguardia cuyo objetivo es vincular a la ciencia con la toma de decisiones, sostuvo Enrique Cabrero Mendoza, director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), durante la inauguración de esta unidad especializada.

Dijo que “para el Conacyt ha sido fundamental apoyar el desarrollo de estos proyectos” y explicó que en 2006 “arrancó el Programa de Laboratorios Nacionales del Conacyt, para apoyar el equipamiento de infraestructura especializada a las instituciones de ciencia, tecnología e innovación, para contribuir en la expansión de sus capacidades de servicio técnico, académico y de investigación con estándares de calidad internacional”.

A través del Programa se han apoyado 33 laboratorios nacionales, con un monto superior a los mil millones de pesos y “se busca que en un plazo determinado los laboratorios sean capaces de ser autofinanciables”, informó el también miembro de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).

En su oportunidad, José Narro Robles, rector de la UNAM y también miembro de la Academia dijo que en la inauguración se sentía “buen ambiente” y por el ánimo de celebrar la inauguración de un centro importante y “porque nos convoca uno de los grandes tópicos del ser humano, el medio ambiente, un asunto del siglo XXI que nos hace preguntarnos cómo hemos sido capaces de alterar las cosas que la naturaleza ha desarrollado, cómo somos capaces de atentar contra la cadena de la vida, cómo ponemos por encima de los intereses de la vida los individuales o de corporaciones o de grupos, y que no necesariamente tienen que ver los de la mayoría de los seres humanos y mucho menos de la mayoría de las especies”.

Y para poder plantear este tipo de preguntas y sus posibles respuestas, se realizó hoy el corte de listón para que en el Laboratorio trabajen grupos multidisciplinarios y así “entrar a la sociedad del conocimiento, por eso tenemos que acelerar el paso, invertir más en ciencia (…), buscar más cosas que nos articulen, temas de gran interés para el desarrollo nacional, estamos a tiempo de poner el freno y revisar”, aseguró.

Cabrero Mendoza dijo tener la seguridad de que este esfuerzo rendirá frutos no sólo a favor de la ciencia, sino también en el fomento a la enseñanza, la docencia y la investigación; pero sobre todo, en la implementación de políticas públicas y la toma de decisiones de manera informada, con propuestas que tengan un sustento científico y un enfoque hacia el desarrollo sostenible.

Señaló que aunque el Laboratorio está ubicado en un Instituto, se logró gracias a la colaboración del Instituto de Ingeniería y del Programa Universitario de Medio Ambiente, así como del Instituto Nacional de Ecología, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

Por su parte, César Domínguez Pérez Tejada, director del Instituto de Ecología de la UNAM, sostuvo que el edificio es un paradigma de construcción sustentable en México y que “formaliza una nueva forma de vinculación entre el quehacer científico y la gestión pública”.

Informó que Lancis “será un espacio de discusión inter y transdiciplinaría e intersectorial en el que la información científica y los avances tecnológicos serán la base de los procesos de gestión pública y el manejo sostenible de los recursos naturales”.

Adelantó que pronto se firmará un convenio de colaboración entre la UNAM y Semarnat, y que “la fundación de Lancis significa un paso más hacia en el camino de incrementar la pertinencia social del quehacer científico”.

En el Lancis se desarrollan proyectos tan importantes como el diagnóstico nacional de plantas invasoras, el ordenamiento ecológico y regional del Pacífico Norte, el sistema de soporte de decisiones para el ordenamiento ecológico, que permitirá homogeneizar los criterios para elaborar esta herramienta de política ambiental y la caracterización funcional de la milpa desde sus aspectos biogequímicos, genéticos y ecológicos por mencionar algunos temas.

En su participación, Rodolfo Lacy Tamayo, subsecretario de Planeación y Política Ambiental de la Semarnat informó que “los próximos 8 y 9 de abril Lancis albergará un evento muy importante, donde se definirá la agenda GEF (Global Environment Facility), el fondo que apoya las iniciativas globales a favor del medio ambiente de las Naciones Unidas; y lo que haremos es decidir todo lo que se va a invertir en temas globales para los próximos cuatro años”.

El evento concluyó con un recorrido por las instalaciones del Laboratorio, el cual también fue inaugurado por el coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) José Sarukhán Kermez y por Carlos Arámburo de la Hoz coordinador de Investigación Científica de la UNAM, ambos miembros de la AMC.

Como parte del público invitado acudieron el presidente de la Academia, José Franco López, también estuvo presente la ex presidenta de la AMC, Rosaura Ruiz, así como académicos, estudiantes, investigadores, familiares, amigos y medios de comunicación.

El laboratorio

En el diseño del edificio se integraron los estándares internacionales más altos, así como los “Criterios de Construcción Sustentable de la UNAM”, desarrollados por la Dirección General de Obras y Conservación. Estos criterios son: minimizar los impactos ambientales, ahorro y manejo eficiente del agua, eficiencia energética y atmosférica, uso de materiales y recursos ambientalmente amigables y calidad ambiental en espacios interiores. Se pretende que el edificio del Laboratorio llegue a ser un modelo arquitectónicamente sostenible bajo las restricciones técnicas y presupuestales de una entidad pública como la UNAM.

Elizabeth Ruiz Jaimes