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Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/165/09
México, D. F., 26 de noviembre de 2009.

• Durante la ceremonia realizada esta mañana, la AMC y el ICYTDF anunciaron la creación de un premio exclusivo para mujeres científicas de la capital
• Los investigadores de la AMC que recibieron la distinción son: Luis Héctor Hernández Gómez, del Instituto Politécnico Nacional, así como Jesús Adolfo García Sáinz, Flavio Manuel Mena Jara y Jorge Morales Montor, todos ellos de la Universidad Nacional Autónoma de México
• Reunida en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento de esta ciudad, la comunidad científica solicitó al gobierno federal exentar de impuestos los insumos para la investigación científica

Los galardonados con Esther Orozco, directora general del ICYTDF; Marcelo Ebrard, jefe de Gobierno del Distrito Federal, y María Teresa Juárez de Castillo.
Foto: AMC
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Cuatro investigadores miembros de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) fueron distinguidos con el Premio Ciudad Capital: Heberto Castillo Martínez, en su edición 2009 Rumbo al Bicentenario, otorgado por el Instituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal (ICYTDF).

En el marco de la entrega de los galardones, Rosaura Ruiz Gutiérrez, presidenta de la AMC y Esther Orozco Orozco, directora general del ICYTDF, acordaron la creación de un nuevo premio exclusivo para mujeres científicas de la Ciudad de México.

La presidenta de la AMC sostuvo que es fundamental la creación de reconocimientos y estímulos especiales para mujeres, con la finalidad de impulsar su participación en la ciencia, y así subsanar los factores que dificultan el avance de las mujeres en el ámbito científico.

Agregó que la Academia Mexicana de Ciencias, mediante su Comisión de Premios, llevará a cabo la evaluación de los currícula, y el Instituto de Ciencia y Tecnología aportará los recursos para la nueva distinción.

Durante la ceremonia de premiación, llevada a cabo en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento del Distrito Federal, Esther Orozco, Directora General del ICyTDF y miembro de la AMC, destacó que en la Ciudad de México se tiene la visión y la convicción de que el camino de México hacia un futuro pleno debe construirse con base en la educación, la ciencia y la tecnología.

Los investigadores de la Academia galardonados son: Luis Héctor Hernández Gómez del Instituto Politécnico Nacional, así como Jesús Adolfo García Sáinz, Flavio Manuel Mena Jara y Jorge Morales Montor, todos ellos de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Luis Héctor Hernández Gómez, del Instituto Politécnico Nacional, recibió el premio en la categoría de Tecnologías Urbanas, por sus contribuciones al desarrollo del transporte y particularmente del transporte eléctrico y de nuevas tecnologías.

El investigador, quien además es miembro del Sistema Nacional de Investigadores, ha realizado proyectos de biomecánica, evaluando la integridad estructural de las vértebras cervicales, lumbares, el fémur y la cadera, con lo cual ha hecho recomendaciones a cirujanos ortopedistas en cuanto a procedimientos desde el punto de vista biomecánico.

En su mensaje, Luis Héctor Hernández destacó la importancia de la transferencia de tecnología a los sectores productivos, para hacer socialmente útil el conocimiento básico generado para la solución de problemas.

Jesús Adolfo García Sáinz, del Instituto de Fisiología Celular de la Universidad Nacional Autónoma de México, recibió el premio en el categoría de Salud, por su brillante trayectoria en la investigación biomédica y por su contribución al estudio de los receptores adrenérgicos.

Durante la ceremonia, García Sáinz, también reconocido por ser el autor mexicano más citado en el periodo 1980-1992, insistió en la importancia de usar a la ciencia y a la tecnología como palancas del desarrollo, y pidió a quienes toman las decisiones exentar de impuestos los productos requeridos para la investigación científica y simplificar los procesos de importación de dichos artículos.

Es importante destacar que la propuesta del científico miembro de la AMC fue respaldada tanto por la presidenta de la Academia Mexicana de Ciencias, como por el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Marcelo Ebrard Casaubón, quienes reconocieron que tanto los extenuantes trámites burocráticos de importación, como los impuestos a los insumos requeridos, constituyen un obstáculo al buen funcionamiento de la ciencia mexicana.

En su oportunidad, Flavio Manuel Mena Jara, investigador de la UNAM, quien fue distinguido en el área de Ciencias Básicas, por ser pionero de la neuroendocrinología en México, dijo que es responsabilidad del gobierno mexicano proveer las mejores condiciones para el desarrollo científico y tecnológico del país y, con ello, evitar la dependencia del extranjero.

El investigador también es reconocido por su participación en la descentralización de la ciencia, por su labor para fundar el Centro de Neurociencias de la UNAM, en Juriquilla, Querétaro.

Por su parte Jorge Morales Montor fue premiado en el área de Ciencias Básicas, por su relevante producción científica en el campo de la parasitología y su notable contribución en la formación de recursos humanos.

El científico repatriado a México en el año 2001 por el CONACYT, insistió en la importancia de impulsar una ciencia de clase mundial, no sólo en los discursos, sino también en las asignaciones presupuestales pues, de lo contrario, México se encamina a la mediocridad, al subdesarrollo y a ser un eterno maquilador.

También recibieron esta distinción Iván Antonio Izquierdo, de la Pontificia Universidade Católic do Rio Grande do Soul, en Ciencias Básicas; Mario César López Camarillo, de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, en Salud, y Jaime Sánchez Valente, del Instituto Mexicano del Petróleo, en Medio Ambiente.

A la ceremonia, presidida por el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubón, tambien asistieron René Asomoza, director del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional, y Carlos Arámburo de la Hoz, Coordinador de la Investigación Científica de la UNAM.