Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/29/08
México, D.F., lunes 3 de marzo de 2008

• El investigador Jorge Barojas Weber mostró cómo la pintora se burla de la física clásica y con su imaginación hace creíble lo imposible
• El movimiento de objetos terrestres y celestes, las fuerzas, el tiempo, el espacio, la transformación de la energía, son algunos temas de la física presentes en la obra de la artista española

Jorge Barojas Weber, investigador adscrito a la Facultad de Ciencias de la UNAM.
Foto: Naixieli Castillo García/AMC
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Ante un grupo compuesto en su mayoría por jóvenes estudiantes, Jorge Barojas Weber, investigador adscrito a la Facultad de Ciencias de la UNAM, compartió sus reflexiones sobre la presencia y la ausencia de la física en la obra de la pintora española Remedios Varo.

La plática formó parte del programa Domingos en la Ciencia, de la Academia Mexicana de Ciencias, cuyo objetivo es acercar a los niños y jóvenes a la ciencia.

“Vamos a hablar de la física en donde no hay física, donde las cosas ocurren de forma diferente a como suceden en la física tradicional; me interesa ver cómo a través de la imaginación y la creatividad de una gran artista puede uno tener idea de qué hace y no hace la física” dijo el investigador.

Barojas Weber explicó que la construcción de modelos, el movimiento de objetos terrestres y celestes, las fuerzas, el trabajo mecánico, las formas y transformación de la energía, son temas de la física que se encuentran presentes en la obra de la pintora pero, aclaró, “no con los ojos de un físico sino con los ojos de un poeta que ve los cuadros, siente y vive el mundo de la física de otra manera”.

La conferencia titulada La física en la obra pictórica de Remedios Varo, se realizó este fin de semana en el auditorio La Capilla del Museo de Ciencias Universum, y en ella Barojas Weber se valió de diapositivas para mostrar y comentar alrededor de 20 obras de Remedios Varo en las que no rigen las leyes de la física clásica.

Entre ellas, piedras que se elevan mediante el sonido de una flauta, seres que se desplazan sobre el cabello de su barba, prismas en los que la luz no se refracta, astros embotellados, hilos que unen la Tierra con los astros, y cristales de hielo que encierran aves o plantas. “Hay cosas que no van a ocurrir nunca, pero aquí suceden, las vemos, nos parecen simpáticas y posibles”, destacó.

El investigador consideró que la pintora, a pesar de no haber tenido una instrucción científica formal, sí conocía algunas cuestiones de física o tenía ciertas ideas científicas, por ejemplo, de la teoría de la relatividad ya que el espacio-tiempo está plasmado en su obra.

“Se burla de la física clásica y hace posible, con su imaginación y su arte, lo imposible”, subrayó y destacó el hecho de que algunos autores han empleado las pinturas de Remedios Varo en escritos, memorias o libros con temas científicos, especialmente en torno a la gravitación”.