Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/116/08
México, D. F., 28 de octubre de 2008
La metodología que Darwin siguió para construir la Teoría de la Evolución y la selección natural es paradigmática para toda la ciencia y para toda la biología, afirmó Rosaura Ruiz Gutiérrez, presidenta de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), durante su presentación en el Foro: México y el mundo actual, organizado por el Centro de Cultura Casa Lamm y el diario La Jornada.
En su ponencia, presentada dentro del panel A 150 años de la Teoría Evolucionista de Darwin, Rosaura Ruiz dijo que la teoría de la evolución es un hecho científico tan sólido “como el hecho de que la tierra es redonda”.
En este sentido, la presidenta de la AMC hizo una exposición sobre cómo construyó Darwin la Teoría de la Evolución, a la que definió como “un proceso dinámico y continuo cuyo resultado es la gran diversidad de formas, extintas y vivientes, que han poblado nuestro planeta”.
Destacó que la evolución es aceptada como un hecho, y la selección natural como el principal mecanismo que explica la diversidad y adaptación de los seres vivos.
Detalló que la selección natural es un proceso que ocurre solamente si se dan las siguientes 3 condiciones: que haya una variación entre los individuos de una especie para algún carácter; que exista una relación consistente entre el carácter y la habilidad para lograr pareja, aumento en la fecundidad o sobrevivencia y que, al menos en parte, este carácter sea independiente del ambiente, es decir que sea heredable.
En relación con el nacimiento de la Teoría de la Evolución, recordó que fue hasta finales del siglo XVIII y principios del XIX cuando empezaron a desarrollarse teorías que planteaban la transformación de las especies y el origen natural de los seres vivos.
Durante su charla, Rosaura Ruiz expuso a los asistentes las ideas que llevaron al naturalista inglés a abandonar el creacionismo, que implicaba una visión estática del mundo, y poco a poco cambiar a una visión de cambio permanente, e ir construyendo la Teoría de la Evolución y la selección natural.
En este contexto, explicó como Darwin atravesó por una Primera crisis, durante la cual se encontró hechos que no se explicaban con la teoría creacionista vigente, como el hecho de que hubiera una mayor cantidad de especies en los continentes en relación con las islas, o la observación de fósiles en lugares donde no habían ocurrido cambios climáticos.
Ruiz Gutierrez explicó cómo posteriormente Darwin atravesó por una Segunda crisis, durante la cual empezó a construir una teoría que explicara los hechos que observó durante su célebre viaje en el Beagle.
La investigadora aseguró que actualmente la mayoría de los científicos y biólogos aceptan la evolución y la teoría de la selección natural, aunque aún no exista un total acuerdo en torno a las relaciones entre las especies. Asimismo, dijo que “todas las explicaciones de la biología solo tienen sentido a la luz de la Teoría de la Evolución”.
La presidenta de la AMC subrayó que todos los niños mexicanos tienen el derecho de conocer la Teoría de la Evolución de Darwin, por lo que invitó a los participantes a defender la ciencia y a exigir que el Estado destine un mayor presupuesto a la ciencia y la educación.
Por su parte, Julio Muñoz Rubio, del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la UNAM, opinó que la Teoría de la Evolución de Darwin constituyó una revolución científica que abarca al conjunto de las ciencias, mas allá de la biología, como la filosofía y la epistemología, por lo que consideró que tienen un alcance histórico tan grande “sólo comparable con la teoría de Marx”.
Carlos López Beltrán, investigador del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM, quien también participó en el panel, destacó la importancia de sacar a Darwin de los lugares comunes donde se le ha ido empujando y opinó que la gran influencia del científico se debe a que colocó al ser humano como objeto de estudio de las ciencias naturales.
El panel finalizó con la participación de Javier Flores, jefe de la Sección de Ciencia del diario La Jornada, quien recordó que la ciencia moderna ha confirmado muchas de las afirmaciones de Darwin y puso como ejemplo que el desciframiento del genoma humano ha revelado que el ser humano y el chimpancé comparten mas del 99% de sus genes.
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