Reforma
07 de febrero de 2015
Diana Saavedra
Cd. de México.- De las más de 4 mil especies de árboles que hay en México, sólo se ha estudiado a menos de 400 de ellos, asegura investigadora del Instituto de biología de la UNAM.
Esto pese a que su estudio permitiría mantener sana la biodiversidad de los bosques, considera la experta en botánica agronómica en un comunicado de prensa de la Academia Mexicana de Ciencias.
También conocidos como plantas leñosas son los que generan la madera tan ampliamente utilizada, explotada y que experimentan procesos de crecimiento periódicos.
En todas las plantas el tallo presenta un crecimiento primario que consiste en el aumento de altura o longitud, y sólo en algunas plantas, como es el caso de las especies leñosas, se da un crecimiento secundario que implica el grosor.
Sin embargo, hasta ahora, la mayor parte de los esfuerzos de estudio se han dedicado a la revisión las especies importancia comercial, como son algunas coníferas, principalmente el pino y árboles de las zonas tropicales.
De estos últimos, especialmente, se ha dado seguimiento a especies como el cuachichile (Aphananthe monoica, también conocido como chilesmin, cuerillo, pipín, tomatillo o varilla) y el polocastle (Pleuranthodendron lindenii, llamado golondrina, pochitaquillo, palo de maíz, maicillo, cachóngara y catarrita).
La especialista detalló que antes de cortar la madera es necesario revisar y estudiar los arbustos o árboles pequeños del sotobosque, o los matorrales, que han sido poco estudiados, pero al ser quitados pueden impactar al crecimiento de las especies leñosas.