Inédita fiesta académica en la UNAM por el Año de la Fí­sica

La Crónica de Hoy
Rigoberto Aranda

2005-01-14.- Bzzzzz… El Jalador atrae con su fuerza magnética a todos. Sí­, Qué Payasos hizo bailar y jugar a cientos de jóvenes de preparatoria quienes, de aquí­ para allá, respondí­an a las fuerzas de la fí­sica, fí­sica objeto de la celebración en los 100 años de la presentación de Albert Einstein de tres documentos milagrosos.

En sincroní­a con varios paí­ses del mundo, México inició con una divertida fiesta la conmemoración del Año Internacional de la Fí­sica, que reunió a funcionarios y estudiantes de la UNAM, UAM, Politécnico y otras instituciones donde se lleva a cabo actividad cientí­fica.

¡Si no me divirtiera, no me dedicarí­a a la fí­sica!, afirmó eufórico Marcos Moshinsky, quien recibió el caluroso reconocimiento del rector Juan Ramón de la Fuente, pero sobre todo, la cálida y admirada ovación de los jóvenes estudiantes.

Moshinsky, quien hace dos dí­as se quejaba de la falta de popularidad, este dí­a recibió un cariñoso desmentido por parte de los estudiantes, quienes lo miraban con una mezcla de admiración y curiosidad, esa curiosidad que Moshinsky busca en ellos.

Arrimaron el camarón. Los muchachos de las prepas rebasaron las previsiones de los organizadores. No sólo llenaron la Sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario, sino que tuvieron que habilitarse los espacios de Universum para que quienes ya no cupieron, presenciaran, ví­a circuito cerrado, la fiesta fí­sica preparada.

Esos jóvenes recibieron a la entrada su globito de látex de manos de émulos de Einstein, nueve albertos y una alberta, confesarí­a Julia Tagí¼eña, directora de Divulgación de la Ciencia.

Entonces, salió El Jalador, quien merced a las fuerzas magnéticas y gravitacionales propias de la ocasión, atraí­a y repelí­a a propios y extraños, y puso a jugar a todos, incluidos fí­sicos y estirados académicos de la primera fila del auditorio.

Y digo estirados no porque fueran sangrones, sino porque iban y vení­an siguiendo la fuerza del payaso, quien se las jalaba (las risas) y todos jugaban divertidos.

Al rector Juan Ramón de Fuente no le cabí­a la satisfacción de tener entre sus filas (la primera fila de la Sala Covarrubias) al rector de la UAM, Luis Mier y Terán, al director del IPN, José Enrique Villa, y al presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, Octavio Paredes, a quienes presumió después de la jalada y la arrimada de camarón. Y es que los Qué Payasos pusieron a bailar a todo mundo con la canción del camarón.

Después de ser presentado emotivamente, los estudiantes presentes se pusieron de pie para ovacionar al fí­sico Marcos Moshinsky, a quien el rector mismo calificó como el principal fí­sico en la historia de México.

Después, se anunció la llegada de otro cientí­fico mexicano. Pompas y globitos de látex. Andrés Bustamante estudió arduamente fí­sica… al menos para su presentación como doctor Chunga, con una entrada en escena digna de Einstein.

¡Tómala barbón! Es, a decir del eminente doctor Chunga, algo así­ como el grito de guerra de los cientí­ficos.

Y con papelitos de colores, incluidos en la bolsita con globos, Chunga explicó los colores primarios.

Después, cuando el doctor Chunga anunció que era momento de jugar con las pompas, los rectores de la UNAM, la UAM y el director del Poli rebotaban en sus asientos… de la risa. Los tres académicos terminaron, junto con cientos de alumnos de las preparatorias de la máxima casa de estudios, llenos de jabón (el de las pompas), papelitos y entusiasmo.

La jornada inaugural del Año Internacional de la Fí­sica fue una inédita jornada ludoacadémica, en la que la solemnidad y la rigidez quedaron como la octava ley de Newton, misma que invocó Chunga.

Así­, con globos enfriados con nitrógeno lí­quido, mangueras corrugadas y tubos de aluminio, el doctor Chunga dio una cátedra de fí­sica, y al igual que los muchachos de la banda ¡Qué Payasos!, de profesionalismo, pues en verdad hicieron la tarea de prepararse para estar a la altura.

De cerca no son sangrones. Al final, los jóvenes opinaron sobre el evento y los funcionarios asistentes. Las risas todaví­a llenaban sus rostros, y se declararon encantados con la producción del evento.

¡Hasta me cayó bien el rector. ¡Tómala barbón! Todos le entraron al relajo. Deberí­a acercarse más seguido con nosotros!, afirmó Estela, estudiante de la Prepa 2, quien sin embargo reservó sus mejores piropos para Moshinsky. ¡Es un chingón, es un ruco a todo dar, neta que sí­ dan ganas de estudiar!.

Estefaní­a del Parral, madre de familia, comentó que así­ deberí­an presentarse otras especialidades, además de la fí­sica. ¡Los niños desde sexto año deberí­an recibir este tipo de estí­mulos para que naciera en ellos un interés vocacional más claro. Se sacaron un diez!.

Sí­ nos ponemos de acuerdo
El rector Juan Ramón de la Fuente, al presentar a Luis Mier y Terán, rector de la UAM, y José Enrique Villa, director del Instituto Politécnico Nacional, en el marco de la inauguración de actividades del Año Internacional de la Fí­sica, celebrada en Ciudad Universitaria, no pudo evitar afirmar:! Nosotros sí­ nos podemos poner de a cuerdo!, en referencia al entorno polí­tico nacional , lo que provocó el aplauso de los presentes.

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