EL Universal
10 de noviembre de 2005
Fernando Guzmán Aguilar
El equipo de investigadores encabezado por Tusié Luna estudia diversos agentes portadores que ayuden a detectar el mal en la población y atenderlo
La doctora María Teresa Tusié Luna y sus colaboradores del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM y del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición «Salvador Zubirán», han identificado, en diabéticos mexicanos, una variante del gen PPARg, de riesgo para el desarrollo de insuficiencia renal crónica, una complicación muy frecuente de la diabetes.
Este hallazgo podría establecer las bases para la elaboración de una prueba molecular que permita identificar, en la población abierta, a diabéticos en riesgo de padecer dicha complicación incapacitante e incluso letal de la diabetes, enfermedad que en México ya es la primera causa de muerte. Así, se abriría la posibilidad de impedir, limitar o retrasar su aparición y evolución.
Causas genéticas
El interés de los investigadores encabezados por Tusié Luna, quien es jefa de la Unidad de Biología Molecular y Medicina Genómica, se centra en definir las causas genéticas (el componente hereditario) de la diabetes, principalmente de aquella que se diagnostica en adultos jóvenes.
Este tipo de diabetes es más frecuente en México que en Estados Unidos y Europa, debido a factores genéticos propios, así como a una mala alimentación aunada a una disminución de la actividad física.
Los pacientes que la desarrollan (antes de los 40 años) tienen más probabilidades de sufrir complicaciones como ceguera (retinopatía) o insuficiencia renal crónica terminal.
Identificación de genes
Tusié Luna dice: «Si logramos identificar el tipo y la combinación de los genes que predisponen al desarrollo de la diabetes en nuestra población, podremos entender mejor los mecanismos que originan esta enfermedad y contribuir a diseñar y establecer herramientas para pronosticar, prevenir o retrasar sus complicaciones».
Desde hace ocho años, la investigadora universitaria y sus colaboradores estudian distintos genes que influyen en la aparición de la diabetes temprana y de una variante que incluso puede manifestarse desde la infancia, llamada diabetes MODY (Maturity Onset Diabetes of the Young, por sus siglas en inglés).
En el estudio participan alrededor de 500 pacientes con diabetes temprana y con diabetes tardía tipo 2, con y sin complicaciones, y alrededor de 30 familias, incluyendo aquéllas cuyos miembros padecen diabetes MODY. Todos son captados por medio de instituciones de salud de tercer nivel en la ciudad de México.
Segunda etapa
En una segunda etapa, con financiamiento de Conacyt, Tusié Luna y sus colaboradores pretenden estudiar la variante del gen PPARg, asociada al riesgo de desarrollo de insuficiencia renal crónica en la población abierta.
«Con el acceso a una muestra representativa de la población de entre 18 y 65 años de edad, colectada en la Encuesta Nacional de Salud del año 2000, podremos evaluar si esta variante del gen está asociada o no a la insuficiencia renal crónica o a estadios primarios de daño renal causados por diabetes pero también por otras patologías», apunta Los resultados de este estudio serán la base de una potencial prueba molecular para diferenciar a los pacientes con riesgo de desarrollar insuficiencia renal de quienes no. Esto permitirá prevenir, revertir o retrasar la progresión del daño renal mediante el uso de distintos fármacos.
Componente genético distinto
En el caso de familias MODY, los investigadores han descubierto que la diabetes en México podría tener un componente genético distinto del identificado en otras poblaciones. Una evidencia de esto es el hecho de que la mayoría de las familias mexicanas estudiadas no presenta ninguno de los genes asociados a esa variante en poblaciones caucásicas.
«Además dice Tusié Luna, cada familia podría tener un gen alterado distinto, de tal manera que su identificación serviría no sólo para conocer mejor el origen genético de la diabetes en general, sino también para diseñar algún tipo de diagnóstico presintomático en los sujetos jóvenes de las familias afectadas.»
Durante el embarazo
Otro tipo de diabetes temprana que estudia Tusié Luna y sus colaboradores es la gestacional, que representa la primera causa de enfermedad y muerte en el Instituto Nacional de Perinatología de la ciudad de México.
Esta diabetes es promovida por el ambiente hormonal propio del embarazo. Aunque desaparece después del parto, quienes la sufren tienen un alto riesgo de desarrollar diabetes posteriormente.
La diabetes gestacional condiciona distintas complicaciones como malformaciones congénitas en el feto y macrosomía (feto demasiado grande), entre otras.
Es muy frecuente y poco diagnosticada. Se detecta mediante una prueba de tolerancia a la glucosa, aplicada entre las semanas 24 y 28 del embarazo.
«Ya estamos diseñando estrategias que nos hagan posible identificar aquellos genes que son de riesgo para el desarrollo de la diabetes gestacional en nuestra población. Después podríamos utilizarlos como un método diagnóstico al inicio del embarazo», comenta Tusié Luna.
Causas variadas
Las investigaciones realizadas hasta ahora sugieren que las causas genéticas de la diabetes pueden ser muy variadas y que los genes identificados en otras poblaciones no necesariamente participan en la etiología de la diabetes en nuestra población.
«Por lo tanto señala la investigadora universitaria, no podemos depender de los conocimientos generados en otros países, ni de potenciales productos farmacológicos desarrollados en otras partes del mundo».