Raúl Cruz y Rigoberto Aranda
La Crónica de Hoy
2005-03-04.- Después de que Jaime Parada ívila, titular del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), diera a conocer que el financiamiento para 2005 que le otorgaran a la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) es de 35 millones de pesos, 15 millones menos que lo aprobado en la Cámara de Diputados, Octavio Paredes López, presidente de la AMC, afirmó que ¡hemos llegado a un acuerdo público y de buena voluntad, donde si cumplimos todos, podremos operar bien!.
Dicho acuerdo precisa que aparte de los 35 millones de pesos por parte de Conacyt, la AMC recibirá cinco millones más a través del Instituto Federal Electoral (IFE) —que tiene su origen en las multas a partidos políticos— y otros 10 millones que algunos legisladores prometieron conseguir para su operación.
Paredes López no quiso abundar sobre la decisión del Conacyt en prescindirle de 15 millones que ya estaban asignados, ¡llegamos a un acuerdo y eso es una muestra de la buena voluntad de todas las partes, entendemos que los recursos de Conacyt tampoco son los mejores. Por eso, si cumplimos todos podremos operar bien esos 50 millones significarían que por primera vez estaremos bien financiados!, aseguró.
Sin embargo, recordó las limitaciones que en ocasiones vive la institución a su cargo ¡a veces tenemos que retrasar los pagos o prescindir de otras cuestiones. Por ejemplo, ya empieza la Olimpiada Nacional de Química en Sonora y no teníamos para los boletos de los muchachos, por lo cual la universidad de ese estado nos ayudo, esa es la buena voluntad!.
Tales situaciones reflejan el estado de la AMC que a pesar de contribuir al desarrollo científico y tecnológico del país sigue sufriendo de la escasa percepción de su importancia en algunas esferas gubermentales.
Arturo Menchaca, coordinador de Física de la AMC y director del Instituto de Física de la UNAM, aseguró que ¡no se vale, aunque el presupuesto del Conacyt está en el aire, que un recurso que ya estaba etiquetado sea retirado!, en referencia a los 15 millones.
Reveló la situaciones a las que se enfrentan ¡el año pasado nos vimos muy mal económicamente pues se tuvo que reducir al mínimo muchas de las actividades. Los programas de divulgación fueron los que se redujeron sensiblemente, entre ellos estaban los Domingos en la Ciencia y la revista Ciencia, la cual se llegó a contemplar la idea de cerrarla por el escaso presupuesto!.
Para el académico el apoyo de la Cámara es apreciable ¡pues eso quiere decir que la percepción es que los diputados tienen mejor opinión de la ciencia que el gobierno federal!.
Ante tal situación, Salvador Martínez Della Roca, presidente de la Comisión de Educación en la Cámara de Diputados, quien fue de los que se comprometió a conseguir a través del Congreso los 10 millones extras, se mostró sorprendido de que el Conacyt sólo quiera destinar 40 millones de pesos en total a la AMC.
Señaló que el Congreso de la Unión aprobó los 50 millones para este organismo y que el monto no tuvo ninguna observación por parte del Ejecutivo dentro de la controversia al Presupuesto de Egresos que actualmente analiza la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
En el marco de la presentación de la colección de libros Ciencia y tecnología en México en el Siglo XX. Biografías de personajes ilustres, Martínez Della Roca recordó que existe una partida que se llama ¡Donativos! y que el año pasado obtuvo más de 700 millones de pesos ¡Â¿entonces porque no es posible asignarlos de ahí?!, sostuvo.
Biografías homenaje a científicos célebres
La Academia Mexicana de Ciencias (AMC) presentó la colección de libros Ciencia y tecnología en México en el siglo XX. Biografías de personajes ilustres, donde se quiere ¡dejar testimonio que estas biografías son una celebración a la vida, la vida de estos forjadores, y a su infinita pasión por el conocimiento! que ayudó a avanzar y enriquecer el campo de la investigación, mencionó Octavio Paredes López, presidente de dicha institución.
Con la publicación del cuarto y último volumen de esta serie, culmina la colección que desde el año 1999 fue auspiciada por la AMC, el Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República (CCC) y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), en el marco del convenio de colaboración suscrito entre las tres instituciones.
René Drucker, ex presidente de la AMC, dijo que ¡es un homenaje a los científicos que han sido los constructores y han desarrollado las diferentes áreas de la ciencia!.
Entre las biografías que se pueden encontrar están las de Eduardo Aguirre, de los primeros investigadores en bacteriología o Ruth Gall, precursora en el estudio de las ciencias y tecnologías espaciales.