El Economista
30 de octubre de 2013
Redacción
Los grandes desafíos que enfrentan el avance de la ciencia mexicana, en general, y de la física, en particular, fueron abordados en el marco del LVI Congreso Nacional de Física, que se realiza en San Luis Potosí. Una de las actividades dentro de esta reunión de especialistas -en la que se presentan cerca de 900 trabajos originales de investigación-, fue la mesa titulada: “¿Hacia dónde va la física en México?”, en la que participaron la doctora Julia Tagüeña y los doctores José Franco, Jorge Flores Valdés, René Asomoza, David Ríos y Jaime Urrutia, como moderador, todos ellos destacados representantes de esta disciplina científica y miembros de la Academia Mexicana de Ciencias. Correspondió a los dos primeros abordar los aspectos generales del desarrollo de la ciencia en nuestro país.
Julia Tagüeña, directora adjunta de Desarrollo Científico del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) se refirió a algunas de las acciones que actualmente realiza la dirección a su cargo para el impulso de todas las áreas del conocimiento, incluida la física. Indicó que el incremento del presupuesto en ciencia, tecnología e innovación (CTI), que tiene como meta alcanzar 1% del Producto Interno Bruto al final de la presente administración, está orientado a cumplir con el objetivo de transitar hacia la economía y sociedad del conocimiento.
Advirtió además que uno de los propósitos es lograr la articulación del gasto que actualmente se distribuye entre varias dependencias y secretarías de Estado. En su intervención, mostró diversos indicadores del desarrollo de la CTI en nuestro país y destacó la necesidad de una mayor presencia del sector productivo y el reto que representa elevar el número de patentes nacionales.
Tagüeña se refirió además a la necesidad de incrementar el capital humano mediante el aumento de miembros del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), el impulso a los programas de posgrado y a los centros de investigación. Se refirió a las solicitudes presentadas este año para ingresar al SNI, cuyo número es de 10,000, destacando la presencia de mujeres, quienes representan 37% del total y en algunas áreas, como la medicina, superan 50 por ciento.
Planteó también la importancia de fortalecer el desarrollo regional y las redes temáticas de investigadores, así como a los laboratorios nacionales.
Sintetizó los retos que enfrenta actualmente el desarrollo de la CTI y las acciones que se realizan para enfrentarlos, entre ellos el del capital humano, frente al cual se desarrollan programas de repatriación, apoyo a posdoctorados y la retención de investigadores.
Otro de los retos es la atención a las prioridades nacionales, para lo cual se impulsan los fondos sectoriales y se ha lanzado una convocatoria para proyectos orientados a atender problemas nacionales.
Para favorecer la participación del sector productivo, dijo Tagüeña, se desarrollan asimismo diversos proyectos de apoyo a emprendedores y a la innovación. Agregó que con el objetivo de lograr la articulación de la política de CTI, se trabaja conjuntamente con la Coordinación de CTI de la Oficina de la Presidencia y se identifican los temas prioritarios en el programa especial de CTI, que el Conacyt presentará próximamente. Finalmente, en materia presupuestaria, las acciones incluyen el incremento del presupuesto de ciencia, tecnología e innovación.
URGENTE, LA PARTICIPACIÓN PRIVADA
José Franco, presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), se refirió a tres temas en su intervención. En primer lugar, al programa ¿Hacia dónde va la ciencia en México?, que es coordinado conjuntamente por el Conacyt, la AMC y el Consejo Consultivo de Ciencias de la Presidencia de la República (CCC).
Informó que es un esfuerzo sin precedentes en el que participan cientos de expertos en reuniones realizadas en diferentes estados del país a través de mesas de análisis en las que se discuten los retos y el futuro de los diferentes campos de la ciencia, entre ellas la física, desde las perspectivas académica, tecnológica y sectorial.
Las mesas de discusión se iniciaron en febrero pasado y hasta hoy suman más de 80, cifra a la que se habrá de añadir las que se están realizando.
También se refirió a la Agenda Ciudadana de Ciencia, Tecnología e Innovación, que constituye el primer esfuerzo para involucrar a la población en la toma de decisiones sobre CTI.