El Universal
7 de diciembre de 2012
Notimex
México compra 20 veces más tecnología de la que produce, la parte más débil de la cadena es la innovación y la falta de inversión en la ciencia
El presidente de la Academia Mexicana de Ciencias, José Franco, lamentó que en la nación exista un «producto de 20 negativos en la balanza de la investigación, es decir, que compremos 20 veces más de tecnología respecto a la que producimos».
Además, reconoció un grave retraso en avances tecnológicos y lo ejemplificó de esta manera: ciencia y tecnología, pequeños; innovación, inexistente.
El eslabón más débil de la cadena es la innovación, donde debe participar el sector privado, subrayó el especialista, al tiempo de añadir que «no somos productores» y de ahí el alto índice de importación.
Ello derivado de que México cuenta con un ejército muy «pequeño» de investigadores, lo que aunado a una inversión de sólo el 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional y una inexistente innovación, lo colocan en una grave desventaja ante el mundo.
Franco habló del tema durante el el Foro Internacional de Estrategias y Política para el Desarrollo de la Innovación, Ciencia y Tecnología.
Dicho evento fue organizado por la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Poder Legislativo y la Universidad Autónoma de Zacatecas.
Al hablar sobre lo que llamó «el estado de salud de la ciencia», subrayó la existencia de investigares de alto nivel, capaces de competir a nivel mundial; sin embargo, aceptó, que su número es muy reducido.
Por tanto, explicó, el ejército que hace investigación es chico comparado con las grandes economías. Y acotó «frente a ellos tenemos entre 5 y 10 menos del número de investigadores para ciencia y tecnología… Tenemos un cuerpo pequeño. Somos chaparros».
Asimismo, lamentó que la inversión en México para este renglón sea sólo del 0.4 por ciento del PIB y confió en que el gobierno federal que recién inicia, cumpla el objetivo establecido en el pacto firmado el pasado domingo y logre incrementar, al final del sexenio, al uno por ciento el presupuesto para ciencia, tecnología e innovación.
gpdm