Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/215/11
México, D.F., 27 de octubre de 2011
- Para ganar, hay que invertir, afirma Arturo Menchaca Rocha
- El presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), Arturo Menchaca Rocha.
Foto: AMC
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La poca inversión registrada en los últimos 30 años en materia de ciencia y tecnología orilla a México a comprar el 96 y vender sólo el cuatro por ciento del conocimiento que se utiliza en el país, aseguró el presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), Arturo Menchaca Rocha.
Si se invierte poco en ciencia y tecnología se crece poco, afirma en el documento “El Único Camino Hacia el Desarrollo de México pasa por el Conocimiento: Recomendaciones para un Mejor Futuro”, en el que asegura que para ganar hay que invertir.
«En un análisis detallado sostiene que con sus 112 millones de habitantes, México se coloca en el país número 11 en ese rubro, así como en el 14º lugar mundial por su economía, sin embargo, la inversión pública en ciencia y tecnología (IPCYT), como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB), se ha mantenido estancada durante 3 décadas en el 0.35 por ciento. Esto coloca al país por debajo de la media entre las naciones latinoamericanos y de El Caribe (0.6%); en particular de Brasil (1%), Chile (0.7%) y Argentina (0.5%), así como entre los últimos lugares de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).»
Menchaca Rocha, afirma que las estadísticas mostradas en el informe 2009 en ese organismo sobre México, al comparar con el comportamiento económico de sus otros países miembros, muestran que existe una clara correlación en la IPCYT y el PIB.
Así, explica, la baja tasa de crecimiento del PIB mexicano, en las mismas tres décadas puede considerarse como un ejemplo típico de esta correlación. Es decir, si se invierte poco en ciencia y tecnología se crece poco.
Señaló que la primera recomendación de la OCDE es hacer un reconocimiento político sobre la importancia de las inversiones relacionadas con la generación de conocimiento, que se refleje en un financiamiento apropiado. “A falta de ello, hay variables económicas en las que, más que estancadas, hay muestras clara de que retrocedemos”, señala.
En ese sentido, dio como ejemplo el que en el índice de cobertura tecnológica de México (cociente entre lo que exportamos sobre el volumen global de las transacciones) ha disminuido de 0.24 a 0.04 en la última década. “Es decir, tratándose de tecnología, hoy compramos el 96% y vendemos el 4%
Entre las recomendaciones que hace en este rubro, se encuentra un cambio que impacte en la economía mexicana que considere alejar las actuales políticas de inversión pública en este rubro llevada a cabo en los últimos administraciones federales e incrementar la inversión en ciencia y tecnología hasta llegar al 1 por ciento como lo establece la Ley de Ciencia y Tecnología.
La idea es, sostiene, lograr una mejor educación científica y tecnológica ligada a la investigación y a la educación superior, así como duplicar la producción de graduados con doctorado incrementando su contratación y construyendo con ellos nuevos centros de investigación científica y tecnológica que requiere el desarrollo económico del país canalizando los recursos necesarios para becas y proyectos a través de la creación de una Secretaria de Ciencia y Tecnología.
- Fig. 13. Evolución IPCYT en México en las últimas décadas.
Foto: CONACYT, Enlace 7
- Fig. 14. Correlación entre IPCYT (ordenada) y PIB (abscisa).
Foto: OCDE, Enlace 5
- Fig. 15. Evolución comparativa del PIB (per cápita) mexicano en las últimas décadas.
Foto: OCDE, Enlace 5