La Prensa
11 de octubre de 2011
Organización Editorial Mexicana
México
México.- En los recursos asignados por la SCHP para el Ramo 38, al menos cuatro programas sustantivos del Conacyt resultan afectados con un severo déficit que alcanza los 1.4 mil millones de pesos respecto a los requerimiento mínimos para la operatividad del sector, que son del orden de 14 mil 915 millones de pesos, por lo que este día el Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT) inicia, junto con el resto del Grupo Vincula, un intenso cabildeo con los miembros de las comisiones legislativas de Ciencia y Tecnología y la de Presupuesto y Cuenta Pública, con el propósito de recuperar los niveles de crecimiento que, aunque moderados, han permitido el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación de México en los últimos 20 años.
Los programas del Conacyt que resultarían más afectados con estas disminuciones son: Fondos Mixtos, que dejaría de recibir 300 millones de pesos; Fondos Sectoriales, con 100 millones pesos menos y Fondos Regionales, que perdería 200 millones de pesos. Por otro lado, el programa de apoyo al fortalecimiento de la infraestructura científica y tecnológica dejaría de percibir 300 millones de pesos, en tanto que el de innovación tecnológica de alto valor agregado perdería 500 millones de pesos, todos ellos con respecto a la propuesta presupuestaria original presentada el pasado 8 de septiembre.
Se destaca, también, la casi nula atención que los investigadores y su quehacer científico han merecido por parte del Ejecutivo, como lo demuestra el hecho de que solo una vez en lo que va del presente sexenio ha convocado a reunión al Consejo General de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación, máximo órgano de CTI, o que ha postergado la entrega de los Premios de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC) hace ya cuatro años, rompiendo con ello una tradición de medio siglo.
De consumarse las referidas disminuciones presupuestarias, México resentirá graves costos no sólo en cuanto a investigación científica, desarrollo tecnológico e innovación, sino en sus capacidades para producir bienes y servicios que mejorarían la calidad de vida de la sociedad, así como en su competitividad global y el potencial de crecimiento económico que el país obtendría si considera como prioritaria la inversión en estos rubros.