El Sendero del Peje
21 de febrero de 2009
Notimex
México.- La presidenta de la AMC, Rosaura Ruiz, consideró que corresponde a los científicos establecer las restricciones en la investigación y experimentación siempre y cuando haya un comité bioético que determine su utilidad.
Al referirse al proyecto legislativo que pretende la prohibición de investigar con células troncales embrionarias, opinó que la intención es penalizar el aborto.
Refirió que legisladores del Partido Acción Nacional (PAN) se oponen a esa actividad, pero desde el punto de vista científico se ha demostrado que esas investigaciones tienen amplias perspectivas terapéuticas.
Las principales razones de quienes desaprueban los experimentos de esa índole definen a un cigoto como ser humano, por lo que los representantes panistas sugieren que se declaren los derechos humanos desde la concepción, explicó.
«A mí eso me parece absurdo. Tenemos que discutir en qué etapa de desarrollo un embrión es un ser humano, porque una célula o un conjunto de ellas no lo es», sostuvo en entrevista.
La oposición, detalló, también se relaciona con la idea de la creación, con si los seres humanos son creados por Dios y no como resultado de la evolución, como el resto de los animales y las plantas.
Aseveró que está plenamente demostrado que el ser humano es resultado de un proceso evolutivo que involucra a todos los seres vivos desde un primer microorganismo que apareció en el planera hace tres mil 500 millones de años.
A su parecer, la iniciativa no pretende prohibir la investigación en sí misma, sino penalizar el aborto y evitar el uso de anticonceptivos, sobre todo los de emergencia, así como la fecundación in vitro.
La titular de la AMC aseguró que a pesar de que el presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología del Senado, Francisco Javier Castellón, considera que una propuesta de esa naturaleza no tiene futuro en el Congreso, el organismo que encabeza estará al pendiente del debate.
«Estoy al pendiente, pues es mi obligación como presidenta de la AMC no permitir que haya limitaciones a la investigaciones científicas», advirtió.
Ruiz Gutiérrez recordó que en la historia de la ciencia, las restricciones nunca han sido respetadas, pues en el pasado se prohibió la disección de cadáveres, pero con su práctica fue posible conocer la anatomía humana.
Sin embargo, reconoció que esa transgresión no siempre ha sido positiva, pues durante el régimen nazi en Alemania se llevaron a cabo investigaciones que no pueden aceptarse, pues en esa actividad deben respetarse los derechos humanos y de los animales.