Milenio Diario
17 de noviembre de 2008
Entrevista por: Francisco Mejía
Alfredo Herrera Estrella
Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad
De no publicarse el régimen especial de protección del maíz, México tendría un retraso enorme; con el uso masivo de la biotecnología en el campo habría una mayor productividad y se generarían nuevas vacunas, incluso humanas.
La mejor forma de proteger al maíz es estudiar su información genética. No hay más. Para ello urge, según Alfredo Herrera Estrella, del Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad del Cinvestav, unidad Irapuato, un marco legal, información precisa y dejar atrás posturas políticas. De lo contrario, dijo en entrevista con MILENIO, se pondría en riesgo el desarrollo económico el país. El especialista no tiene la menor duda en el uso masivo de la biotecnología en el campo: habría una mayor productividad y se generarían nuevas vacunas, incluso humanas. Para evitar rezagos en biotecnología es necesario quitar prohibiciones tajantes en el uso de organismos modificados genéticamente. Su tesis es una: definir ya en torno a los transgénicos.
¿Cuál es la importancia de la publicación del régimen especial de protección al maíz?
Ese documento nos daría un marco legal, con el que se pueda mover algo que se ha tratado de establecer en el país. Por muchos años hubo una moratoria que en algún sentido nos ha dejado atrás respecto a otros países.
¿Cómo está México en comparación con otros países?
Estados Unidos y Alemania, sobre todo el primero, son las grandes potencias que van más rápido en cuanto a investigación de organismos transgénicos.
¿En América Latina?
Argentina en términos de liberación de transgénicos. En Chile hay cierta apertura. En México tenemos que definir con claridad y certeza si hay algún problema con el uso de transgénicos; se especula mucho y hay posiciones a favor y en contra, pero si no se hace una investigación con todas las medidas de seguridad no vamos a tener opinión propia al respecto.
¿Cómo cuáles?
En términos de seguridad contenida en laboratorio hay muchos lugares en el país a escala invernadero; ahora hay nuevas reglas para dar un seguimiento claro, donde todo organismo modificado genéticamente, no sólo las plantas, debe estar registrado. En ciertos organismos hay permisos especiales.
¿Hay consecuencias si se sigue retrasando la publicación de ese documento?
Tendríamos un retraso enorme, pondríamos en riesgo muchos aspectos económicos del país. Por ejemplo, la producción de algodón podría verse afectada por algunas plagas y eso nos crea dependencia de otros países donde ya hay vacunas.
¿Cómo afecta a los investigadores mexicanos la lenta respuesta de las autoridades en el tema?
Nos ha afectado históricamente ahora. Hubo etapas en que los investigadores vivíamos en la ilegalidad. Tal y como estaban las leyes no se podía manejar ningún tipo de organismo transgénico, ni siquiera bacterias que se utilizan de manera rutinaria. Era ilegal, pero ya ha sido modificado en cuanto a la carencia de posturas claras y amplias en todos los sentidos.
¿Qué gana el país con el uso masivo de la biotecnología en el campo?
Podríamos tener una mayor productividad, podríamos generar vacunas.
¿De que tipo?
Vacunas en plantas y para muchas enfermedades, incluso humanas. En relación al campo podríamos tener mejores variedades de diferentes cultivos; para tener una productividad mayor podríamos desarrollar nuevas herramientas para uso de la industria. Muchos microorganismos podrían ser manipulados genéticamente para producir encimas o biocatalizadores, para hacer más productiva la industria.
¿Tiempos en el debate?
Años diría yo, sin llegar a una conclusión bien clara. Respecto al caso especial del maíz llama la atención las opiniones de Greenpeace.
¿Presiones?
Según los acuerdos internacionales de biodiversidad o al Tratado de Cartagena, debe haber una petición de la opinión pública y aquí sólo existe el interés de Greenpeace.
¿Es la máxima oposición?
Es el organismo que ha manifestado abiertamente una postura. Pero no es claro que la ciudadanía en general tenga una opinión al respecto.
¿En los círculos científicos?
Lo que queda claro en esas manifestaciones es que es la posición de Greenpeace. Sí hay otros grupos interesados de manera genuina en dar una opinión con cierto respaldo científico, positiva o negativa, respecto a estos asuntos.
¿La Academia Mexicana de Ciencias?
Ellos se han manifestado en cuanto a los transgénicos. Se coincide en que no debe haber una prohibición tajante del uso de los organismos modificados genéticamente y que lo mejor es un análisis caso por caso y bajo qué condiciones de seguridad y control se debe hacer.
¿No sólo del maíz?
En general. Existe una posición de hacer un análisis caso por caso de lo que se maneje estrictamente en laboratorio, después de haber hecho la solicitud formal y avalado por autoridades correspondientes.
¿Atavismos, posiciones políticas, morales?
Hay una cuestión política; es un tema escabroso no fácil de manejar y los costos pueden ser altos si se da en un sentido u otro. Es una de las razones por la cuales no se avanza. Cuestión de política por un lado, pero por otro hay desconocimiento no tienen la seguridad de lo que pueden decir o de la autoridad que tienen para dar una opinión y liberar una regulación adecuada.
¿Los argumentos de los que se oponen?
Son un poco fuera de contexto. Se maneja que se debe ayudar a los agricultores a que se desarrollen y por otro lado se maneja también que se debe impedir el flujo de genes a toda costa. Se pone énfasis en el cuidado cuando haya accidentes y que escape algún organismo transgénico o alguna forma de ilegalidad.
¿Contradictorio?
Quizá lo que hace falta es un poco más de precisión. En el caso del maíz, Greenpeace dice: “estamos perdiendo el maíz, lo estamos vendiendo y para desprotegerlo vamos a permitir la entrada de las trasnacionales a comerse el maíz”. Hay otras maneras de proteger el acervo genético del maíz, por ejemplo, estudiar su información genética. Nosotros hemos logrado la secuenciación del maíz, incluso por arriba de estudios internacionales.
¿Secuenciación?
Sí, se puede usar en un futuro para acelerar los procesos de mejoramiento genético tradicional del maíz. Se pueden manipular genes del mismo maíz. Hay maneras de proteger al maíz una de esa maneras es estudiar el genoma incluso compitiendo con grupos.