Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/174/17
Ciudad de México, 18 de agosto de 2017
- Después de compartir en México y Hong Kong talleres para profundizar en el conocimiento mutuo y explorar el potencial que tienen estas áreas científicas, los investigadores pretenden avanzar en esta relación de colaboración académica.
- El grupo de investigadores trabajó en la sede de la Academia Mexicana de Ciencias luego de visitar centros de investigación establecidos en Ensenada, Baja California; Querétaro y Ciudad de México.
- Participantes del Foro sobre estrategias de colaboración AMC-NANOMXCN-México-China:NANO Materiales/Ciencia/Tecnología para Energía Renovable y Remediación Ambiental.
Foto: AMC/Elizabeth Ruiz Jaimes.
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Un grupo de científicos chinos y mexicanos dedicados a la investigación en nanociencias y nanotecnología se reunió en la Academia Mexicana de Ciencias para realizar el Foro sobre estrategias de colaboración AMC-NANOMXCN México-China: NANO Materiales/Ciencia/Tecnología para Energía Renovable y Remediación Ambiental, el tercero de una serie de talleres que se organizaron en los últimos tres años para promover la colaboración en este campo entre México y China incluido Hong Kong.
La actividad tuvo como objetivo analizar la posibilidad de avanzar hacia la concreción de iniciativas y acuerdos que permitan el intercambio y la colaboración académica en el área de nanociencias y nanotecnología.
El taller realizado en la sede de la AMC ayer jueves, estuvo precedido por los celebrados en México en 2015 y en Hong Kong en 2016; fueron organizados para explorar las posibilidades y el potencial de la colaboración. “Lo que puedo decir es que el resultado ha sido mejor de lo que esperaba”, dijo Juan Antonio Zapien, investigador de la Universidad de la Ciudad de Hong Kong, iniciador de los talleres y de una serie de reuniones de trabajo que ha llevado a cabo en conjunto con un grupo de investigadores pertenecientes a las comunidades científicas de ambos países.
Necesario aumentar el intercambio a través de redes mundiales en temas de frontera
Como anfitrión de la actividad académica, José Luis Morán, presidente de la AMC, señaló que en los dos talleres anteriores participaron miembros de la Academia, pero “ahora tuvimos la oportunidad de ofrecer las instalaciones de nuestra asociación para que se realizara aquí la discusión en una dinámica nueva con tres temas específicos: energía, remediación ambiental e intercambio académico”, sin duda, temas de interés que comparten mexicanos y chinos”.
Morán agregó que las mesas de trabajo tuvieron la finalidad de servir para el intercambio de ideas e información sobre las problemáticas que tienen las dos naciones y de la manera en que se puede cooperar para encontrar soluciones. “La nanotecnología ha demostrado ser útil para crear, por ejemplo, dispositivos para remediar ríos; los materiales nanoestructurales juegan un papel muy importante en temas de energía y de remediación ambiental”.
El presidente de la AMC destacó que la reunión habrá de contribuir al conocimiento mutuo que vienen teniendo los investigadores de China y México, para que encuentren puntos en común y trabajen en ellos. Consideró que el que haya asistido un representante de la Embajada de China como el encargado del vínculo entre la academia y el área de tecnología, y que está a cargo de los programas de intercambio, amplía la posibilidad de establecer programas con apoyo financiero e impulsar con más fuerza el intercambio académico que buscan.
José Luis Morán resaltó también la importancia de concretar la posibilidad de intercambio de jóvenes investigadores para la formación de recursos humanos en el área de la nanotecnología, en la que China es una potencia. “La mejor manera de incrementar la relación -bilateral- es con estudiantes, y estos foros de cooperación internacional se deben impulsar para fortalecer los recursos humanos de nuestro país y propiciar su crecimiento a través de redes mundiales en temas de frontera”.
China, primero en publicaciones sobre nanotecnología
De acuerdo con estadísticas publicadas en el sitio web de StatNano, en 2016 se publicaron 151 mil 352 artículos de nanotecnología en el mundo –106 países—; China ocupó el primer lugar con el 34.1%, seguido por Estados Unidos, con 16%; mientras que México se colocó en el lugar 28 con 0.74%, producto de mil 135 artículos.
Desde el año 2012 China mantiene una tendencia ascendente en la publicación de artículos de nanotecnología, su producción es 2 y 1.2 veces mayor que la de Estados Unidos y la Unión Europea, respectivamente.
El director de Ciencia y Tecnología de la Embajada de la República Popular de China en México y representante del Ministerio de Ciencia y Tecnología de ese país, Zhu Hao, mostró su satisfacción por la visita que realizó la delegación de investigadores a nuestro país, ya que “es una oportunidad para que los científicos chinos pueden conocer mejor a sus colegas mexicanos y puedan establecer estrechas relaciones y mejorar la cooperación en materia de ciencia y tecnología (CyT)”.
Zhu Hao apuntó que el intercambio que se busca en nanociencias y nanotecnología es parte del marco de cooperación en CyT entre los dos gobiernos, y que este interés puede avanzar hacia acuerdos firmados por las agencias de los dos países.
“Ambas partes ya mostraron sus intenciones para fortalecer esta cooperación. Los gobiernos pueden aportar apoyos y financiamiento para convocatorias de proyectos conjuntos de investigación o la construcción de laboratorios o centros de investigación conjuntos en nanotecnología”, dijo Hao.
El Foro, tercer taller
Constó de tres mesas de trabajo: energía renovable, remediación ambiental y movilidad académica y de estudiantes, en las que participaron investigadores chinos y mexicanos procedentes de diversas universidades, y autoridades representantes del sector nacional de CyT.
Juan Antonio Zapien, investigador mexicano que trabaja desde hace 15 años en la Universidad de la Ciudad de Hong Kong, narró que la idea de crear los talleres se originó con el fin de unir a un grupo de investigadores que sirvieran de embajadores científicos para difundir la ciencia china en México y la ciencia mexicana en China, y así romper la barrera cultural y propiciar un acercarmiento.
Sobre los talleres, “si bien en las dos primeras ocasiones tuvimos un apoyo económico significativo de Conacyt, para este año el Consejo nos pidió mostrarles el interés real que existe y cuánto se puede avanzar, y mostramos que el interés está por el lado chino pues apoyó junto con otros centros de investigación en México este tercer taller.
“China tiene más colaboración con dos universidades de Estados Unidos que con toda la república mexicana. Esto hace 20 años hubiera sido natural porque no tenía China el poderío económico ni el liderazgo científico que ahora tiene, pero no sólo ha tenido incremento constante en su economía, también lo ha hecho en ciencia y tecnología”.
Zapien resaltó que el proceso de los talleres ha servido para que investigadores mexicanos y chinos identifiquen sus áreas de interacción, ya que el desarrollo de las nanociencias en el país asiático es muy fuerte. Asimismo, señaló que no causa sorpresa que como resultado de esa inversión constante en las últimas dos décadas China haya tomado un dominio no solo en cantidad sino en la calidad de las publicaciones.
El interés en escalar la relación académica entre México y China en el área de las nanociencias y nanotecnología es sólido, opinó Juan Antonio Zapien, que recordó que el año pasado el director del Centro Nacional de Nanociencia y Nanotecnología de China le expresó su interés de crear un centro de investigación, no virtual, real, en nuestro país “y lo volvimos a escuchar nuevamente este jueves a través de Zhu Hao”.
Otra de las participantes y organizadoras mexicanas en los talleres de “NANOMXCN Mexico-China Workshop on NANO Materials/Science/Technology”, es Sandra Rodil, del Instituto de Investigaciones en Materiales de la UNAM, quien manifestó que lo que esperarían después del intercambio académico que se hizo es ver convocatorias conjuntas. “Eso es lo que estamos buscando en el fondo”.
Rodil expuso que la movilidad de estudiantes siempre puede existir, pero si se pretende tener más impacto esto sería posible a través de proyectos bilaterales México-China que cubran esta temática. “Sí hay otros temas —aeroespacial, aeronáutica, agricultura—, pero no se está cubriendo el área de materiales, de remediación ambiental, energía. Lo que queremos es que cuando se piense en lanzar convocatorias México-China nanociencias y nanotecnología estén incluidas”.
La investigadora expuso que la idea no es “cooperar por cooperar”, lo que ella ve es la oportunidad de que esta colaboración “jale” a la comunidad mexicana a subirse al tren académico de otras comunidades científicas. “En la actualidad, los investigadores chinos son editores de las revistas del mayor factor de impacto. Nosotros no tenemos esa masa crítica de gente publicando en revistas de alto impacto en nanociencias y nanotecnología, por eso tenemos que buscar las alianzas que nos ayudan a movernos en esa dirección”.