Academia Mexicana de Ciencias
Boletín AMC/35/06
México, D.F., lunes 26 de junio de 2006
- Científicos de 70 instituciones reciben estudiantes de licenciatura de toda la República Mexicana en sus laboratorios
- La AMC otorgó becas a ganadores de las Olimpiadas Nacionales de Química y Biología
Foto: Archivo.
A partir de este lunes, más de 620 estudiantes de licenciatura acudirán a diversas instituciones de todo el país a realizar prácticas de investigación durante sus dos meses de vacaciones, bajo la supervisión de científicos de alto nivel, dentro del programa Verano de la Investigación Científica de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
Creado con el objetivo de fomentar el interés de los estudiantes por la actividad científica en diversas áreas del conocimiento, este programa contribuye a definir la vocación científica, ampliar los conocimientos y las opciones para futuras etapas de formación profesional.
«Con él se canaliza el interés de los jóvenes becarios hacia los estudios de posgrado», mencionó Mauricio Cabrera Ríos, ingeniero industrial de la Universidad Autónoma de Nuevo León, quien es investigador anfitrión desde hace tres años.
Añadió que el Programa de Posgrado en Ingeniería en Sistemas (del cual es coordinador de investigación( se ha beneficiado por la calidad y empeño de los estudiantes que ha recibido desde el año 2000, muchos de los cuales regresan a estudiar alguna maestría a dicha universidad.
«Estoy encantado de trabajar con estos estudiantes. Son muy buenos, dentro de su juventud son profesionales. Cada año constato que su trabajo se vuelve más fructífero!, subrayó.
Para la edición número 16 del Verano de la Investigación Científica (que concluirá el 25 de agosto del 2006( se otorgaron 626 becas, financiadas en su mayoría por la AMC. El resto es brindado por la Subsecretaría de Educación Superior y el Instituto Científico Pfizer.
Cuarenta y cinco de estas becas se asignaron a estudiantes ganadores de las Olimpiadas Nacionales de Química y Biología de la AMC, de los concursos La Ciencia para todos del Fondo de Cultura Económica, y del Decimoséptimo Congreso de Investigación del Centro Universitario Anglo Mexicano de Morelos.
La beca consiste en 5 mil pesos y transporte vía terrestre en caso de realizar la estancia fuera del lugar de residencia, y 2 mil 500 pesos para quienes lleven a cabo en el mismo lugar donde estudian.
En el Verano de la Investigación participan 70 instituciones de educación superior y centros de investigación de todo el país.
Guillermo Jiménez Pérez, del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, Campus Monterrey, también investigador anfitrión del programa de la AMC, destacó que el Verano fomenta el interés de los jóvenes por la ciencia y la tecnología, siempre y cuando sean informados de la contribución que hacen con su trabajo.
¡Mientras mejor conozcan la manera en que su actividad significa un granito de arena a la generación de conocimiento, su perspectiva cambia», mencionó.
Jiménez Pérez consideró que las universidades públicas y privadas deberían comprometerse aún más y destinar apoyos adicionales a sus estudiantes, porque en algunas ciudades el costo de la vida es demasiado alto.
En ese sentido, Cabrera Ríos instó a elaborar un seguimiento de los becarios del Programa de la AMC y, a la par, otorgar más valor curricular a esta actividad para la obtención de becas de posgrado.
«Cuando terminan, desean continuar sus estudios pero muchos no lo logran porque provienen de familias de escasos recursos económicos!, lamentó. ¡He visto estudiantes quedan relegados por falta de recursos para sustentar los primeros meses, que es lo que más o menos tarda el trámite de una beca por parte del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología!.
Finalmente, Luis Quintanar Rojas, de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, destacó que como investigadores anfitriones ha constatado que los jóvenes, además de participar activamente en un proyecto, desarrollan un verdadero interés no sólo por la ciencia, sino que también se sensibilizan hacia los problemas de nuestra sociedad.
«Lo más importante es que toman conciencia de que, a través de la investigación, se pueden proponer soluciones a problemas concretos de la población».